Detenido Jonathan Rhys-Meyers por un violento altercado con su mujer
El actor de Match Point o Los Tudor quer¨ªa fumar de un cigarrillo electr¨®nico en pleno vuelo Miami-Los ?ngeles. Nada m¨¢s aterrizar, le estaba esperando la polic¨ªa
Jonathan Rhys-Meyers vuelve a protagonizar un esc¨¢ndalo en un aeropuerto. Si en septiembre del a?o pasado le denegaron el embarque para un vuelo en Dubl¨ªn, esta vez ha sido Los ?ngeles el escenario del altercado.
En un viaje desde Miami hasta la ciudad californiana, el protagonista de Los Tudor o Match Point ha mantenido una fuerte discusi¨®n con su mujer, Mara Lane, y con la presencia de su hijo de tan solo un a?o.
El momento, seg¨²n cuentan diversas fuentes de American Airlines, ha contado con gran violencia verbal, gritos y un amplio malestar para el resto de pasajeros. El actor ha sentido entonces el deseo de fumar de un cigarrillo electr¨®nico en el ba?o. Las azafatas se han acercado a ¨¦l para avisarle de la expresa prohibici¨®n de hacer eso en el avi¨®n, algo que Rhys-Meyers no se ha tomado demasiado bien.
Cuando el aparato ha tocado tierra, ya estaba la polic¨ªa del aeropuerto de LAX para detener a uno de los actores que m¨¢s proyecci¨®n ten¨ªan en Hollywood. Finalmente, tras unos instantes retenidos, tanto Jonathan como su mujer han sido puestos en libertad tras comprobarse que no hab¨ªa habido ning¨²n tipo de violencia f¨ªsica.
El alcohol le priv¨® de un ¨¦xito mayor
Jonathan Rhys-Meyers puso por las nubes las expectativas en su juventud. Tras actuar en Match Point, toda la industria de Hollywood coincid¨ªa en que pod¨ªa ser la gallina de los huevos de oro. Sin embargo, las malas decisiones y el alcohol le jugaron una mala pasada e inici¨® una decadencia cinematogr¨¢fica que le ha llevado a peque?os papeles en series como "Vikings".
Son m¨¢s de dos d¨¦cadas de lucha contra el alcohol y no han sido pocas las reca¨ªdas. Ha sufrido altercados en los aeropuertos de Nueva York, Dubl¨ªn y Los ?ngeles, ha sido fotografiado en grave estado de embriaguez por las calles de Londres, y tan solo su mujer pudo controlar un poco tal adicci¨®n. La ¨²ltima reca¨ªda, tras enterarse de que su esposa hab¨ªa sufrido un aborto.