Javi Mart¨ªnez da su versi¨®n del pol¨¦mico 'asalto' nocturno a Lezama antes de ir al Bayern

La salida del futbolista Javi Mart¨ªnez del Athletic en agosto del a?o 2012 vino marcada por la pol¨¦mica en torno a la recogida de sus objetos personales.

El Bayern pagaba los 40 millones de euros de la cla¨²sula de rescisi¨®n del jugador y desde el club rojiblanco aseguraban que Mart¨ªnez hab¨ªa saltado la valla de las instalaciones deportivas bilba¨ªnas sin permiso para coger sus pertenencias personales, sobre las 00:15 horas, y hab¨ªa sido reducido por el personal de seguridad.

Siempre seg¨²n la versi¨®n del club, al ser reducido el individuo se identific¨® como Javi Mart¨ªnez. El protagonista contradijo esta versi¨®n desde Alemania: "Me abrieron de forma totalmente normal. De entrar cual ladr¨®n, ni hablar".

Ahora, cinco a?os despu¨¦s, el de Aiegi ha explicado todo para 'The Players Tribune' en un art¨ªculo llamado 'The Bandit' (El Bandido) y asegura que ?Casi todas las partes de esa peque?a travesura eran err¨®neas?.

¡°S¨ª, es verdad, fui yo¡±, pero no como cuentan

Como ?la transferencia se finaliz¨® a ¨²ltimos de agosto? no tuvo tiempo ?de decir adi¨®s? a sus compa?eros y de ?recoger las pertenencias? del centro, explica el zaguero del club b¨¢varo.

Dentro de su taquilla estaban sus botas, una tablet y ropa. ¡°Llam¨¦ al club para organizar ir all¨ª alrededor del mediod¨ªa, pero me dijeron que no. No me dejaron ir antes de entrenar porque pensaban que podr¨ªa crear malas vibraciones¡±, explicaba.

Decidi¨® que la decisi¨®n era justa y se pasar¨ªa sobre las nueve y media de la noche a recoger sus pertenencias. ¡°Llam¨¦ al timbre para que se abriera la seguridad durante unos 15 minutos, pero no lleg¨® nadie. Hubo algunos trabajos de construcci¨®n en ese momento, as¨ª que supongo que el timbre no funcionaba. Llam¨¦ al gerente del equipo, pero ¨¦l no cogi¨® su tel¨¦fono. Sab¨ªa por mis a?os en Lezama que hab¨ªa otro punto de acceso, m¨¢s cerca de los vestuarios, as¨ª que me acerqu¨¦ y llam¨¦ al guardia de seguridad, Iker, para que me dejara entrar.'Iker, Iker, por favor abre', grit¨¦. Sali¨®, abri¨® y me dej¨® entrar. Recog¨ª las cosas y me fui. Eso fue todo. No sucedi¨® nada m¨¢s¡±, dice.

Aunque ahora, pasado el tiempo, se lo toma con humor, al d¨ªa siguiente de lo sucedido no pod¨ªa creer lo que se dec¨ªa en prensa: ¡°Imaginen mi reacci¨®n al d¨ªa siguiente, cuando me dijeron que hab¨ªa ido borracho y que hab¨ªa peleado con el guardia de seguridad. ?Madre m¨ªa! Alguien se invent¨® una buena historia¡±, explica el jugador.

En aqu¨¦l momento Mart¨ªnez ¡°Estaba aturdido. Es una dura lecci¨®n. Pasas a?os de tu vida en un club, dando todo lo que tienes.... Y luego, al final, las cosas no siempre se representan de la mejor manera¡±, concluye.

No obstante asegura que la decisi¨®n de dejar el Athletic fue dura. ?Fue como mi familia? y siempre estar¨¢ orgulloso del tiempo que pas¨® all¨ª, asegura.