Tormenta solar: el fen¨®meno que preocupa a Barack Obama

El presidente de EEUU Barck Obama firmaba el pasado jueves un decreto con el fin de ¡°preparar a la naci¨®n ante eventos meteorol¨®gicos del espacio¡± como ¡°destellos solares, part¨ªculas de energ¨ªa solar y ruidos geomagn¨¦ticos¡±.

Obama ordenaba a la Administraci¨®n Federal elaborar un plan que nos prepare ante una posible tormenta solar que podr¨ªa afectar al pa¨ªs y a gran parte del planeta. Un fen¨®meno meteorol¨®gico que podr¨ªa destruir en pocas horas la red el¨¦ctrica de diferentes pa¨ªses y detener gran parte de los equipos que necesitan de esa energ¨ªa.

Estos fen¨®menos se producen de manera regular y pueden afectar a infraestructuras y sistemas de comunicaci¨®n como sat¨¦lites GPS, sistemas de aviaci¨®n y de distribuci¨®n el¨¦ctrica afectando e interrumpiendo la salud y la seguridad en continentes enteros de forma simult¨¢nea, seg¨²n explica la orden ejecutiva.

El documento se centra en mejorar la coordinaci¨®n ante un posible impacto de estos fen¨®menos mediante la colaboraci¨®n entre ¡°gobiernos, gestores de emergencia, el mundo de la academia, medios de comunicaci¨®n, la industria farmac¨¦utica, organizaciones sin ¨¢nimo de lucro y el sector privado¡±.

Tormenta solar: definici¨®n y efectos

Una tormenta solar es un evento en el que la actividad del Sol interfiere en el campo magn¨¦tico de la Tierra. La explosi¨®n violenta que se produce en la atm¨®sfera del sol tiene una energ¨ªa equivalente a millones de bombas de hidr¨®geno, pero al encontrarse el sol muy lejos de nuestro planeta algunos creen que las tormentas solares no pueden causar da?os reales en la tierra, aunque se ha demostrado que en ocasiones s¨ª ocurre.

El 10 de marzo de 1859 una tormenta solar de mediana intensidad provoc¨® que, tres d¨ªas despu¨¦s de que se produjese, se fundieran los generadores de electricidad de Quebec, Canad¨¢, dejando a seis millones de personas sin energ¨ªa el¨¦ctrica durante 24 horas y provocando p¨¦rdidas de cientos de millones de d¨®lares.

Los expertos aseguran que, adem¨¢s de producirse una interrupci¨®n en las comunicaciones y redes energ¨¦ticas, las explosiones de radiaci¨®n electromagn¨¦tica y plasma magnetizado pueden borrar los datos de la memoria de los ordenadores, socavar operaciones militares e incluso llegar a corroer la tuber¨ªas de agua y alcantarillado.

La tormenta solar m¨¢s grave, conocida como el evento de Carrington, tuvo lugar en el 1859, y caus¨® problemas electromagn¨¦ticos en todo el planeta provocando el fallo de los sistemas de tel¨¦grafo de Europa y Am¨¦rica del Norte. Dada la actual dependencia de la humanidad con la tecnolog¨ªa, una tormenta solar podr¨ªa tener graves consecuencias para la poblaci¨®n mundial.

El decreto de Barack Obama pretende que se act¨²e para detectar con la suficiente antelaci¨®n ante estos fen¨®menos y se tomen las medidas necesarias para poder darles respuesta.