Natalie Portman no ense?a sus pelis de 'Star Wars' a su hijo
La actriz confiesa que nunca le ha puesto los tres episodios en los que ella encarna a la Reina Amidala, y da las razones
Natalie Portman forma parte del selecto grupo de actores y actrices protagonistas que han pasado a la historia como integrantes de la saga 'Star Wars'.
Interpretando a la Reina Amidala, la actriz intervino en los tres episodios precuela que grab¨® George Lucas antes de vender la marca a Disney, que va a rentabilizarla con un gran n¨²mero de pel¨ªculas y spin-offs.
Pero antes de que, en diciembre, llegue a los cines la primera de esas historias alternativas con 'Rogue One', Natalie Portman ha hecho una sorprendente confesi¨®n al presentador Jimmy Kimmel.
No cumple su deseo
La actriz desvel¨® que pese a ser un papel del que se siente orgullosa, jam¨¢s le ha ense?ado sus tres pel¨ªculas de la saga a su hijo. Y eso que cuando las rodaba deseaba m¨¢s que nada poder cont¨¢rselo a sus reto?os.
"Cuando las hice estaba como: 'Esto va a ser de lo m¨¢s guay y un d¨ªa, cuando tenga hijos, podr¨¦ ense?¨¢rselo'". Pero pese a ello, y pese a reconocer que su hijo es un fan ac¨¦rrimo de 'Star Wars' que "est¨¢n obsesionado con ello y saben todo antes siquiera de verlo", nunca le ha mostrado sus pel¨ªculas.
?Por qu¨¦? la razon es muy sencilla, aunque avisamos que CONTIENE SPOILERS (si es que a estas alturas a¨²n no has visto el episodio III, estrenado en el a?o 2005).
"Es inapropiado"
Portman explica que "me di cuenta de que yo muero en las pel¨ªculas, y siento que es algo un poco inapropiado para ense?arle a tu hijo", aportando una raz¨®n muy sencilla y contundente.
Lo cierto es que el peque?o Aleph tiene tan solo 5 a?os, por lo que realmente podr¨ªa costarle comprender qu¨¦ ocurre tras ver a su madre "muriendo"en la pantalla.
Lo que parece seguro es que si es un peque?o fan de 'Star Wars', en cuanto tenga la capacidad de separar ficci¨®n y realidad podr¨¢ disfrutar junto a su madre de todas las pel¨ªculas de la saga, incluyendo comentarios y an¨¦cdotas en primera persona. Un privilegio.