C¨¢ncer, meningitis y una infidelidad: as¨ª es el hombre con peor suerte del mundo
Oliver Pugh tuvo que hacer frente a un tumor, infecciones, un ataque al coraz¨®n y la infidelidad de su mujer con su mejor amigo.
Lo primero que hay que contar es que la historia de Oliver Pugh, el autonombrado como "el hombre con m¨¢s mala suerte del mundo", acaba bien. Aunque su tiempo de lucha le ha costado. Y es que el joven de 26 a?os y natural de Buxton (Inglaterra), pese a su corta edad, ha sufrido todo tipo de contratiempos que ha achacado a su mala suerte: c¨¢ncer, meningitis, un ataque al coraz¨®n y hasta la infidelidad de su mujer con su mejor amigo.
La historia de Pugh, seg¨²n cuenta el diario brit¨¢nico Daily Mail, comienza en 2012, cuando le detectan un c¨¢ncer tras sufrir fuertes dolores en la cadera. La enfermedad le llev¨® al quir¨®fano hasta en tres ocasiones ya que la extirpaci¨®n del tumor se complic¨®. Aquello dej¨® secuelas en el ingl¨¦s, que contrajo la meningitis tras una infecci¨®n causada por las heridas de la operaci¨®n. Aquel a?o no pod¨ªa terminar bien y Oliver Pugh sufri¨® un accidente laboral por el cual tuvieron que amputarle el dedo pulgar de la mano izquierda, herida que tambi¨¦n se infect¨®, esta vez con el peligroso virus SARM.
Su mujer le fue infiel con su mejor amigo
Tres a?os despu¨¦s, cuando Pugh ya se hab¨ªa recuperado de sus enfermedades y disfrutaba de su vida junto a su mujer y sus dos hijos, un nuevo rev¨¦s complic¨® la vida del hombre con peor suerte del mundo. Su esposa Grace le fue infiel con su mejor amigo. "En aquel momento estaba medic¨¢ndome y no pod¨ªa conducir, Grace se ofreci¨® a ir a tomar una copa con ¨¦l y termin¨® en su casa. A partir de entonces, ella me dec¨ªa que iba a ver a su hermana o sus amigos", relata Pugh lo sucedido al Daily Mail. A partir de ah¨ª comenzaron las sospechas y todo acab¨® cuando el joven brit¨¢nico decidi¨® utilizar la app Find My iPhone para localizar el tel¨¦fono de su mujer, descubriendo que se encontraba en casa de su amigo.
Pese al encontronazo, Pugh logr¨® perdonar a su amigo. Pero el curr¨ªculum a hombre con m¨¢s mala suerte del mundo no estaba terminado. Al poco de lo sucedido con su mujer, su separaci¨®n le condujo a una crisis que termin¨® con el s¨ªndrome del coraz¨®n roto: mientras estaba conduciendo, sinti¨® un dolor en el pecho que no era otra cosa que un ataque al coraz¨®n, del que logr¨® salir sin secuelas.
En silla de ruedas
Aquel no iba a ser el ¨²ltimo golpe en la salud de Oliver Pugh. Tras recuperarse del ataque al coraz¨®n, y tal y como narra al medio ingl¨¦s, su c¨¢ncer volvi¨® a aparecer, esta vez m¨¢s agresivo que en la primera ocasi¨®n. El tumor, situado en la espalda, presion¨® la columna, dejando al ingl¨¦s sin movilidad en las piernas y dej¨¢ndole en silla de ruedas. Pugh se someti¨® de nuevo a la operaci¨®n para extirpar el c¨¢ncer y milagrosamente volvi¨® a caminar.
En la actualidad, Oliver Pugh ha dejado atr¨¢s su mala suerte: ha encontrado de nuevo el amor y regenta un bar en su localidad, convirti¨¦ndose en un ejemplo de superaci¨®n extrema.