?'Kanzen' Sorribes!
La castellonense venci¨® a Naomi Osaka, ganadora de cuatro Grand Slam, por segunda vez en su carrera. Es la ¨²nica espa?ola en octavos de final.
Sara Sorribes evit¨® este domingo que lo que hab¨ªa sido un pleno espa?ol en primera ronda del Mutua Madrid Open, con cuatro tenistas de la Armada clasificadas para la segunda, se invirtiera tras las eliminaciones de Nuria P¨¢rrizas, Paula Badosa y Garbi?e Muguruza. La castellonense que, seg¨²n se mire, puede que tenga menos tenis que las dos ¨²ltimas, no tiene nada que envidiarles en cuanto competitividad y casta. Lo demostr¨® con su segunda victoria consecutiva ante Naomi Osaka (6-3 y 6-1 en 1h28), ganadora de cuatro Grand Slams y ex n¨²mero del mundo, a la que venci¨® hace dos a?os en la Billie Jean King Cup, en la eliminatoria de clasificaci¨®n para las Finales 2020 en la que Espa?a gan¨® a Jap¨®n sin Badosa ni Muguruza, por cierto.
Sara, que gan¨® el pasado viernes a la 15? del ranking, Pavlyuchenkova, alcanza por primera vez los octavos de final del torneo y se enfrentar¨¢ el martes a otra rusa, Daria Kasatkina, tenista que entrena en Barcelona y que dio la sorpresa al eliminar a la cuarta favorita, la griega Maria Sakkari (3-6, 6-3 y 6-1). En 2015 la gan¨® con un doble rosco, aunque avanza que "ser¨¢ un partido muy complicado".
"Me siento incre¨ªblemente feliz. Llevo muchos a?os viniendo aqu¨ª. Siempre he pensado que es era un sitio donde pod¨ªa jugar muy bien. Creo que he jugado muy buenos partidos, pero estos dos han sido en los que mejor me he sentido. No dir¨¦ que mi equipo y yo nos lo merec¨ªamos, pero s¨ª que estamos muy felices de poder vivir estas cosas juntos", dijo Sorribes, que s¨®lo cometi¨® tres errores no forzados. Estuvo casi perfecta, ¡®kanzen¡¯ en japon¨¦s. "Blanca (su fisio) me ha vacilado antes diciendo que iba a apuntar en una libreta todos los fallos y le he dicho, 'no vas a poder apuntar muchos'. Ha pasado por eso", brome¨®.
Es cierto que la tierra batida es la superficie en la que peor se desenvuelve Osaka (21-16 contra su 134-56 en pista dura, con las semifinales de Stuttgart 2019 como mejor resultado). Y que la nipona jug¨® con tapes en el gemelo izquierdo. Pero ven¨ªa de ganar con solvencia a Potapova (6-3 y 6-1) y en la previa hab¨ªa dicho que su intenci¨®n era alcanzar al menos la pen¨²ltima ronda. As¨ª que no puede restarse m¨¦rito a lo que hizo Sorribes, que plante¨® el partido a la perfecci¨®n, con bolas altas y ese rev¨¦s cortado que ejecuta tan bien y que es su mejor arma.
Labor de equipo
En el primer set rompi¨® tres veces el saque de Osaka y con su servicio aguant¨® con pericia ante una rival que le hab¨ªa ¡®robado¡¯ a Nadal la manera de restar contra la ventaja, invirti¨¦ndose para devolver la bola de drive en lugar de hacerlo de rev¨¦s. S¨®lo dispuso de un punto de break. Sorribes logr¨® dos de sus cuatro roturas en el encuentro desde un 40-15, un dato que indica su tenacidad, fruto de una ¨¦tica de trabajo exquisita que comparte con un equipazo liderado por la entrenadora Silvia Soler. De ese modo min¨® la confianza de una Osaka que sigue sin dar con la tecla para adaptar su tenis a la arcilla. Su entrenador, Wim Fissette, la ped¨ªa que liftara m¨¢s, que no jugara tan plano. Sara lo vio y puso cada bola en juego hasta apuntarse otra victoria de prestigio. Y aunque ella no lo diga, se la merece.