Nadal prevalece ante Alcaraz en un partido para la historia
El balear de 35 a?os gan¨® en un duelo espectacular al murciano de 18 y al viento para jugar la final por quinta vez este domingo. Su rival ser¨¢ el estadounidense Fritz.
Rafa Nadal no da su brazo a torcer. A sus 35 a?os, cerca ya de los 36, se resiste a entregar el testigo a nadie, ni siquiera a un compatriota que est¨¢ llamado, y este s¨¢bado lo demostr¨®, a ser su sucesor: Carlos Alcaraz. El balear venci¨® al murciano de 18 a?os en tres sets, dos maravillosos y uno, el segundo, deslucido por el viento (6-4, 4-6 y 6-3 en tres horas y 12 minutos). Jugar¨¢ el domingo (23:00, #Vamos) por quinta vez la final de Indian Wells, contra el estadounidense Taylor Fritz (1-0 le domina en el cara a cara). La primera semifinal entre espa?oles en los 46 a?os de historia del torneo no defraud¨®. La ATP la hab¨ªa calificado como "un choque entre el presente y el futuro del tenis espa?ol y quiz¨¢ del circuito". Los dos dieron un ejemplo estremecedor de clase, calidad, esfuerzo, comportamiento y grandeza con 17 a?os de diferencia.
"?l jug¨® muy bien al principio y era dif¨ªcil pararle por sus asombrosos golpes. Luego no es que yo tuviera el control, porque no se pod¨ªa en esas condiciones y no se pudo disfrutar por las interrupciones, pero en el tercero estuve mejor, m¨¢s agresivo, porque no pod¨ªa dejar el partido en sus manos. Estar en la final significa mucho para m¨ª", analiz¨® Nadal, que contin¨²a imparable con un 20-0, su mejor arranque de temporada y s¨¦ptima mejor racha de victorias de su carrera. Puede ser el campe¨®n m¨¢s mayor del torneo, adelantando a Federer, que gan¨® con 35 a?os pero menos meses en 2017. Y, de paso, empatar a 37 t¨ªtulos de Masters 1.000 con Djokovic. Adem¨¢s, vuelve al podio del ranking, es tercero por delante de Zverev.
Alcaraz sali¨® a morder en el primer set y rompi¨® el saque de Nadal de entrada. Aunque despu¨¦s sufri¨® mucho para poner el 2-0 en el marcador y lo pas¨® mal en todos sus servicios. De hecho, el manacor¨ª tuvo 17 opciones de quiebre y Carlos logr¨® salvar 14. Las otras tres le dieron ventaja al ganador de 21 Grand Slams, que por el camino se dej¨® otro servicio por un par de despistes. Lo bueno para ¨¦l y malo para su rival es que con algunos errores de bulto que no suele cometer, se llev¨® la manga inicial en diez juegos con un 79% de primeros y s¨®lo nueve errores no forzados, contra los 23 del prodigio de El Palmar.
Lo que el viento se llev¨®
Alcaraz hab¨ªa planteado bien el partido, armado con su cada vez m¨¢s potente rev¨¦s, tirando bolas altas en alg¨²n momento. No fue, para nada, como el de Madrid el a?o pasado (lo perdi¨® por 6-1 y 6-2). Sin embargo, los esquemas se le fueron al traste por la genial lectura de los partidos que siempre hace Nadal y por un elemento contra el que nada pod¨ªa hacer, el viento. Sopl¨® tan fuerte (con r¨¢fagas de 37 Km/h) que se llev¨® por delante papeles, banderas, toallas, camisetas y hasta alg¨²n toldo. A punto estuvo de derribar tambi¨¦n las botellas milim¨¦tricamente colocadas por los dos jugadores, que comparten esa man¨ªa. Y en esas circunstancias, normalmente, la experiencia es fundamental. Partidos en esas condiciones, ha jugado decenas Rafa y sabe manejarlos con pericia de golfista. Envolviendo los golpes con su drive liftado de zurdo, consegu¨ªa efectos dificil¨ªsimos de responder. No obstante¡
La inclemencia e¨®lica desluci¨® el partido y desaparecieron las ocasiones de rotura, aunque no por mucho tiempo, hasta que con 2-2 le lleg¨® una a Alcaraz, que ajust¨® sus tiros y aprovech¨® las dificultades que ni siquiera Nadal pudo solventar para tomar ventaja. Como hab¨ªa pasado en el primer parcial, este reaccion¨® r¨¢pido y gan¨® un punto decisivo a la remanguill¨¦ para igualar (3-3). Acto seguido, cedi¨® otro saque. A los dos se les hac¨ªa muy complicado hilar jugadas, sobre todo contra el viento, y se sucedieron los breaks. El juez de silla, el espa?ol Nacho Forcadell, se plante¨® incluso parar el partido a petici¨®n de los tenistas, pero continu¨® y la actitud de ambos fue intachable, m¨¢s all¨¢ de alguna queja tan l¨®gica como t¨ªmida. Nadal, que habl¨® con el supervisor del torneo, salv¨® seis bolas de quiebre con 4-4 en un juego fant¨¢stico, pero no pudo con la s¨¦ptima. Situaci¨®n l¨ªmite que ya no logr¨® salvar. Decepci¨®n para ¨¦l, subid¨®n para Alcaraz y fiesta en la grada por el alargue del choque.
El viento amain¨® poco a poco. Lo suficiente para permitir que se elevara el espect¨¢culo y volviera el orden. Pod¨ªa pasar cualquier cosa. La lucha ya era encarnizada, con winners de toda clase (uno de Alcaraz fue a 164 km/h), defensas y contraataques inalcanzables para casi cualquier tenista y un despliegue f¨ªsico que no entendi¨® de edades. Al balear le cost¨® sacar adelante el 3-2 y el murciano se mostr¨® muy s¨®lido al servicio. Rafa asombr¨® por su desempe?o junto a la red despu¨¦s de tres horas de partido. Y eso con pinchazos en la zona pectoral y reflejos en la espalda. Un 'abrazo' del fisio, le puso de nuevo en ¨®rbita. La lucha parec¨ªa no tener fin hasta que Nadal dio el do de pecho, valga la redundancia, para ponerse con 5-3 y saque. No perdon¨® y alarga su hegemon¨ªa en Espa?a (lleva 25 triunfos seguidos contra tenistas de la Armada) y en todo el mundo. No hay quien le pare.
Resultados del Masters 1.000 de Indian Wells.