Federer se gusta y est¨¢ m¨¢s cerca de repetir final en Wimbledon
El suizo alcanza por 18? vez los cuartos del torneo brit¨¢nico y es el m¨¢s mayor que lo consigue (39 a?os y 337) en la Era Open. Espera rival: Medvedev o Hurkacz.
A sus 39 a?os y 337 d¨ªas, Roger Federer reedit¨® este lunes un ¨¦xito que ha alcanzado, con esta, en 18 ocasiones: llegar a los cuartos de final de su torneo preferido, Wimbledon. Es el m¨¢s mayor que lo consigue en la Era Open, por delante del australiano Ken Rosewall, que ten¨ªa 39 y 224 cuando lo logr¨® en 1974. El suizo, de menos a m¨¢s, se gust¨® para vencer a Lorenzo Sonego por 7-5, 6-4 y 6-2 en 2:11, entusiasta y mejorado italiano de 26 a?os y 27? del mundo al que dobleg¨® poco a poco hasta dejarle casi en nada en la central del Grand Slam brit¨¢nico. Federer espera rival: Daniil Medvedev o Hubert Hurkacz, que no pudieron terminar su partido en la pista 2 por culpa de la lluvia. El ruso ganaba por 6-2, 6-7 (2), 6-3 y 3-4. Se reanudar¨¢ este martes desde las 14:30 (#Vamos)
El helv¨¦tico complet¨® una actuaci¨®n convincente ante un rival peligroso, que no hab¨ªa perdido ni un set en sus tres anteriores partidos y ven¨ªa en muy buena forma (jug¨® la final de Eastbourne hace unos d¨ªas).?Le desarm¨® con continuos pasantes en sus subidas y con esa facilidad que tiene para sacar bien cuando lo necesita y as¨ª empezar los puntos con ventaja y tranquilidad. Sus errores no se dispararon ni mucho menos (26) y despach¨® 32 golpes ganadores (s¨®lo cuatro de saque directo). Y le permiti¨® apenas tres opciones de quiebre a su oponente, un buen tenista agresivo que quiz¨¢ se pas¨® de valiente.
La central vibr¨® con el ¨ªdolo al que tantas veces ha venerado, por quien se agolpan para verle, como si de un acto religioso se tratara, cuando cruza la pasarela de la pista a la zona de jugadorees, y que est¨¢ a un par de victorias de repetir final y, por qu¨¦ no, en condiciones de pelear al menos por levantar su noveno t¨ªtulo en Londres, 21? de Grand Slam. La mejor noticia para ¨¦l es que el f¨ªsico le responde, lo suficiente para moverse en un terreno que conoce y en el que se mueve como nadie lo ha hecho.