Wimbledon vibra con el regreso triunfal de un motivado Murray
El dos veces campe¨®n del torneo, que no lo pisaba desde los cuartos de 2017, vennci¨® en cuatro sets a Basilashvili. "Quiero seguir jugando", avisa.
La primera jornada de la 134? edici¨®n de Wimbledon tuvo un inicio complicado por culpa de la lluvia que retras¨® mucho la programaci¨®n de las pistas sin techo y provoc¨® la suspensi¨®n o aplazamiento de 32 partidos, temin¨® con final feliz para los brit¨¢nicos. Andy Murray, campe¨®n en 2013 y 2016, volvi¨® a jugar en la central cuatro a?os despu¨¦s de su ¨²ltimo encuentro en el Grand Slam de la hierba, en los cuartos de final de 2017. Y regres¨® con una esperanzadora victoria ante Nikoloz Basilashvili, un buen tenista que ven¨ªa de jugar las semifinales en Halle y que gan¨® este a?o en Doha a otro veterano sufridor, Roger Federer.
El escoc¨¦s de 34 a?os se desenvolvi¨® bastante bien para ganar al georgiano de 28 y 28? del mundo por 6-4, 6-3, 5-7 y 6-3 en 3:32. Pod¨ªa haber ganado incluso antes, porque sac¨® con 5-2 para cerrar el triunfo y cedi¨® un parcial que ten¨ªa totalmente dominado. Lo importante era recuperar sensaciones y demostrarse a s¨ª mismo que a¨²n puede ser competitivo en el circuito. "Todav¨ªa puedo seguir jugando al m¨¢s alto nivel", advirti¨®, antes de reafirmar su intenci¨®n de continuar en la pelea. "Han sido muy frustrante los ¨²ltimos meses con varias lesiones, pero he trabajado para volver a ponerme en esta situaci¨®n. Me siento afortunado y la gente me quiere. No tiene por qu¨¦ ser mi ¨²ltimo Wimbledon. ?Por qu¨¦? Puedo seguir, quiero y disfruto de ello".
Este es el quinto torneo de Murray en 2021 y en ¨¦l se cruzar¨¢ ahora con un rival m¨¢s asequible, en teor¨ªa, que Basilashvili, el alem¨¢n Otte o el franc¨¦s Rinderknech. El brit¨¢nico acredit¨® buenos n¨²meros en su regreso a Wimbledon, mejores que los de su contrincante, con 37 golpes ganadores y 33 errores no forzados, Y corri¨® m¨¢s que ¨¦l, con buenas defensas que recuerdan a las de sus mejores tiempos, y el rev¨¦s cortado como arma. Habr¨¢ que seguir su evoluci¨®n, pero parece que el cuarto miembro del Big Four no va de farol.