Nadal se da un 'masaje' ante Djere y dice que sigue "vivo"
Nadal gan¨® en tres sets al serbio Djere en un partido pr¨¢ctico donde hizo un juego directo y no forz¨® con el saque por sus molestias en la espalda.

"Hoy se trataba de sobrevivir y sigo vivo", dijo Rafa Nadal despu¨¦s de solventar la papeleta de un estreno en el Open de Australia que llegaba ensombrecido por las nubes de?esas molestias en la espalda que le atormentan desde hace 15 d¨ªas y que le impiden sacar con naturalidad.?Necesitaba exactamente un inicio como el que tuvo este martes. Su rival, Laslo Djere, le dio el ritmo ideal y las suficientes opciones para ganar en tres sets con un juego m¨¢s directo y plano del que suele exhibir el balear. Eso y la rapidez de la pista facilitaron el c¨®modo triunfo del n¨²mero dos del mundo, que celebr¨® con una mirada al cielo de Melbourne su partido 80 en el torneo: 6-3, 6-4 y 6-1 en una hora y 52 minutos.?
Nadal alcanza la segunda ronda del Grand Slam oce¨¢nico por 15? vez en 16 participaciones. S¨®lo ha perdido dos veces a las primeras de cambio en un major: en Wimbledon 2013 ante Darcis y precisamente en Melbourne hace cinco a?os contra Verdasco. Se enfrentar¨¢ el jueves al estadounidense Michael Mmoh (177?, 23 a?os), que venci¨® al serbio Viktor Troicki en cinco duros sets.?
El ganador de 20 Grand Slams inici¨® su intento de alcanzar el 21 con rostro serio en su salida a la pista y una parsimonia estudiada a la hora de servir para no forzar, en ocasiones incluso sin acompa?ar el movimiento, diferente al habitual, con ese sonido suyo tan caracter¨ªstico que hace cuando golpea la pelota. El resto de los mecanismos los ejecut¨® bien, fenomenal el rev¨¦s cruzado, paralelo y cortado, mejor que el drive, y estupendo de piernas y velocidad. M¨¢s f¨¢cil al resto que al servicio, claro.?Es cierto que tampoco le vinieron mal los 36 errores no forzados de Djere, 12 en un primer set que podr¨ªa haber cerrado con un 6-1 y se alarg¨® por el ¨²nico quiebre que encaj¨® en todo el encuentro. Los env¨ªos de Rafa no cog¨ªan tanta curva como de costumbre, iban m¨¢s rectos, porque este a?o en Melbourne Park las pelotas vuelan en cuanto rozan la pista dura.
De menos a m¨¢s
En ning¨²n momento se vio angustia ni malos gestos en el rostro de Nadal, que se fue encontrando mejor con el paso de los minutos, como si le estuvieran dando un masaje. El ba?o se lo dio ¨¦l a un rival que se vio por debajo al poco de empezar la segunda manga y aunque intent¨® oponer resistencia, s¨®lo consigui¨® activar a¨²n m¨¢s los engranajes del ¨ªdolo espa?ol, que ofreci¨® los mejores momentos de su actuaci¨®n en el ¨²ltimo tramo del duelo. Lo agradeci¨® el p¨²blico, que llen¨® m¨¢s de la mitad de la Rod Laver, hasta donde dicta el protocolo anti-COVID. Ah¨ª se gust¨® y se congratul¨® aliviado por una clasificaci¨®n que para ¨¦l significa tiempo, m¨¢s tiempo para mejorar, recuperarse y darse una nueva oportunidad de competir, como a ¨¦l le gusta decir. Por su bien y por el del tenis.