Ferrero, Cascales y el sue?o de Equelite: 25 a?os no es nada
La Academia del ex n¨²mero uno y de su mentor en Villena (Alicante) celebra sus ¡®bodas de plata¡¯ por la singular relaci¨®n de lealtad entre los dos.
En 1995, Antonio Mart¨ªnez Cascales (62 a?os) compr¨® una vieja vivienda en Casas de Menor, una pedan¨ªa de su pueblo, Villena (Alicante), y junto a ella mand¨® construir dos pistas de tierra batida. All¨ª se llev¨® a cinco chicos a los que entrenaba en la escuela de tenis que hab¨ªa puesto en marcha en 1980 y que dirig¨ªa con Samuel L¨®pez, actual t¨¦cnico de Pablo Carre?o. Uno de esos chavales era Juan Carlos Ferrero, campe¨®n de Roland Garros y n¨²mero uno del mundo en 2003. Hoy, 25 a?os despu¨¦s, siguen juntos y su Academia, la JC Ferrero Equelite, cada vez goza de mayor prestigio.
¡°Me acuerdo perfectamente de la noche en que prob¨¦ a Juan Carlos. En 1994 fue campe¨®n en Tarbes (el ¡®Mundial¡¯ infantil) y le salieron muchas ofertas, Barcelona, Florida... Pero su madre estaba ya mal (muri¨® en 1996) y ¨¦l quer¨ªa quedarse. Se vino a vivir conmigo y despu¨¦s a la casa, que estaba en malas condiciones. Se iba la luz si encend¨ªamos dos estufas, as¨ª que yo pon¨ªa a los chicos como castigo ir a coger sarmientos para la chimenea¡±, cuenta Cascales.
¡°Aqu¨ª no hab¨ªa nada alrededor, solo campo y huertos. Poco a poco crecimos hasta lo que es Equelite ahora (20 pistas, gimnasio, sauna, campo de f¨²tbol, residencia, colegio, campamento de verano, hotel rural, piscinas, p¨¢del... con 60 empleados)¡±, dice Ferrero, que recuerda su llegada ¡°con mucho cari?o¡±. ¡°Verlo desde cero hasta lo que es hoy en d¨ªa es muy bonito¡±.
El ascenso internacional del tenista nacido en Ontinyent en 1980 facilit¨® el desarrollo de la Academia, cimentada en una relaci¨®n de lealtad singular entre ¨¦l y Cascales. ¡°Nunca me dedic¨® abiertamente un t¨ªtulo, pero cuando naci¨® su hija fui su padrino. Y llevamos 30 a?os juntos aunque tuvimos broncas enormes y durante dos cursos le entren¨® Jos¨¦ Perlas, contra su voluntad, porque yo le convenc¨ª¡±, explica Antonio, el ¡®abuelo¡¯ de los dos hijos de Ferrero, quien lo confirma: ¡°La nuestra es una historia que pas¨® de la relaci¨®n entrenador-?disc¨ªpulo a algo personal y familiar. Antonio es muy importante para m¨ª¡±.
Gracias a esa fidelidad y por el trabajo de Cascales para conseguir el apoyo de las instituciones de la regi¨®n (¡°No ten¨ªa ni idea del tema organizativo¡±, reconoce), en una villa del interior levantino emergi¨® un centro que compite con los mejores del mundo y por el que pasaron jugadores de la talla de Ferrer y Almagro. En una de sus caba?as vivi¨® Sharapova para preparar varios a?os la gira de tierra y ahora conviven un top-10 como Carre?o y la gran esperanza del tenis espa?ol, Carlos Alcaraz, a quien prepara el propio Ferrero. ¡°No queremos meterle presi¨®n, aunque todos pensamos que puede llegar muy alto y muy r¨¢pido¡±, argumenta el valenciano, que ha fichado a su paisano Carlos Gimeno, subcampe¨®n j¨²nior de Wimbledon en 2019.
Y es que la Academia atrae. ¡°Estamos muy involucrados y el ambiente es familiar. Antonio vive aqu¨ª, yo tambi¨¦n, como muchos de los entrenadores. Es un trato personal y personalizado¡±, dice, orgulloso, quien le da nombre. ¡°Mi filosof¨ªa es poner el inter¨¦s del jugador por delante. Es lo que hice con Juan Carlos¡±, concluye Cascales. As¨ª es Equelite.