En una entrevista concedida por Serena Williams a la edici¨®n estadounidense de la revista GQ, la tenista multicampeona de Grand Slams y exn¨²mero uno del mundo, dice ahora que no se acuerda bien de la bronca que tuvo con el juez de silla Carlos Ramos durante la final del US Open contra la japonesa Naomi Osaka. "Realmente no recuerdo c¨®mo fue, para ser honesta", asegura. "He estado deliberadamente sin pensar en ello" , contin¨²a Serena, que asegura que ha eliminado las aplicaciones de redes sociales de su tel¨¦fono m¨®vil. "No veo la televisi¨®n en absoluto. Intento mantenerme en una burbuja tanto como puedo. Simplemente no quiero involucrarme en las opiniones de otras personas. Que vivan c¨®mo quieran y sientan".
Serena us¨® palabras como "momento de activaci¨®n" para describir lo que le sucedi¨® cuando le dijo al ¨¢rbitro portugu¨¦s: " ?Qu¨¦ pasa con los hombres? Hay hombres aqu¨ª que hacen cosas mucho peores, pero como soy mujer, ?me se?alas faltas porque lo soy y vas a quitarme un juego?", le espet¨® entonces despu¨¦s de llamarle, entre otras cosas, ladr¨®n.
"Me pasaron muchas cosas en el Abierto de Estados Unidos", dice Williams. "Pienso en tres o cuatro cosas diferentes. Especialmente en las ¨²ltimas rondas. Creo que la otra persona podr¨ªa haber sido un poco m¨¢s sensible ante cualquier cosa en ese momento. Ya sabes, era un momento desencadenante. Cuando pasas por una experiencia realmente extrema, no una vez, ni dos, ni tres veces, se convierte en un momento de activaci¨®n ", explica. El caso es que su acci¨®n no fue vista con buenos ojos por algunos compa?eros del circuito, que a pesar de todo la defendieron como profesional y ejemplo para las dem¨¢s tenistas. Sin embargo, su elecci¨®n como mujer del a?o por la revista GQ ha sido criticada en algunos sectores y, sobre todo, en las redes sociales, por que en la portada parec¨ªa que se cuestionaba el g¨¦nero de la tenista al aparecer tachada la palabra "men" (hombre) y entre comillas "woman" (mujer).