Nadal se retira en el 5? set con problemas en la pierna derecha
El espa?ol ganaba a Cilic por dos sets a uno cuando unas molestias le impidieron seguir compitiendo. Perdi¨® la cuarta manga y en la ¨²ltima, ya cojeando, abandon¨®.Nadal - Djokovic en directo: final Open de Australia 2019 en vivo

Rafa Nadal ha tenido que retirarse del Abierto de Australia por culpa de unas molestias que al parecer le han afectado en el muslo derecho cuando estaba ganando a Marin Cilic por dos sets a uno y perd¨ªa 4-1 en el cuarto. El espa?ol intent¨® continuar despu¨¦s de pedir un tiempo muerto m¨¦dico y recibir un masaje, pero se le hab¨ªa visto con problemas para desplazarse ya en la tercera manga y no pudo competir con opciones de ¨¦xito. Contin¨²o jugando y perdi¨® el cuarto parcial. En el inicio del quinto comenz¨® a cojear y despu¨¦s de encajar un break que estuvo cerca de evitar y con el que el croata se adelant¨® 2-0, Nadal dijo basta.
A falta de confirmar el alcance de la lesi¨®n (Rafa Nadal indic¨® que se har¨¢ un test m¨¦dico para conocer el alcance de la lesi¨®n en el muslo derecho), lo que s¨ª parece seguro es que no tiene nada que ver con la que tuvo en la rodilla derecha cuando tambi¨¦n se retir¨® del Masters de Londres el pasado mes de diciembre. Es la segunda vez que abandona en mitad de un partido de Grand Slam. La primera fue precisamente en el Abierto de Australia e igualmente en cuartos de final contra Andy Murray. El brit¨¢nico le estaba dominando claramente (dos sets a cero y 3-0 en el tercero), cundo el balear par¨® por culpa de la rodilla derecha. Melbourne es una plaza maldita para ¨¦l porque en 2014, aunque pudo acabar de jugar la final que perdi¨® contra Stan Wawrinka, la disput¨® con unas molestias en la espalda que le lastraron.
No podr¨¢ por lo tanto repetir final en el major oce¨¢nico, una posibilidad que se ve¨ªa cerca si hubiera ganado este martes en cuartos, porque su rival no iba a ser Grigor Dimitrov, sino Kyle Edmund, que hab¨ªa eliminado antes al b¨²lgaro. Cilic ser¨¢ quien tenga ahora esa opci¨®n.
Cr¨®nica de un partido inacabado
El partido empez¨® fr¨ªo y sin ritmo, con un juego en blanco por cabeza. Los peloteos tardaron en llegar y Cilic puntu¨® primero, pero sufri¨® mucho m¨¢s con su saque, empe?ado en afinarlo demasiado cerca de las l¨ªneas. Nadal hubiera cerrado antes el primer set de haber aprovechado una de las cinco bolas de break que tuvo para ponerse con 4-2 y saque. Pero fue el aviso de lo que llegar¨ªa en el siguiente turno del balc¨¢nico, que justo antes hab¨ªa tenido su ocasi¨®n de romper el buen servicio de Rafa (70% de primeros y 81% de puntos ganados con ellos). El balear tuvo un 0-40 que esta vez no se desperdici¨®. Despu¨¦s confirm¨® la rotura y puso el 1-0 a su favor.
Cilic, que hab¨ªa sacado mal en la primera manga, mejor¨® mucho en la segunda y ya no fue tan f¨¢cil restar para Nadal. A ¨¦l le pas¨® lo contrario y sufri¨® mucho m¨¢s con su servicio. Y eso que se adelant¨® en el tercer juego, pero luego perdi¨® dos por esa falta de consistencia al servir que ya le traicion¨® por momentos ante Schwarztman. Cilic aument¨® su producci¨®n de aces y asegur¨® la igualada.
El tercer set fue dur¨ªsimo, 72 minutos de batalla que se resolvi¨® en la muerte s¨²bita despu¨¦s de que Nadal salvara tres puntos de break en dos juegos diferentes y ¨¦l no lograra convertir el que tuvo con 5-4. Fueron los momentos de m¨¢s emoci¨®n del partido, con golpes defensivos geniales del de Manacor y r¨¦plicas de potencia de Cilic, que fall¨® m¨¢s de la cuenta en el tie-break y acab¨® cediendo un parcial que deber¨ªa haber ganado.
El palo pod¨ªa haber sido importante para el balc¨¢nico, pero a Nadal se le estaba viendo m¨¢s lento. El tiempo en pista le pasaba factura: problemas en el muslo de la pierna derecha. Pidi¨® un tiempo muerto m¨¦dico despu¨¦s de que Cilic le rompiera el saque para adelantarse despu¨¦s 4-1 en el cuarto set. Y tras recibir un masaje volvi¨® a la pista y solvent¨® su saque levantando un 0-40. La remontada parec¨ªa dif¨ªcil por la evidente dificultad del n¨²mero uno del mundo para desplazarse lateralmente. No le merec¨ªa la pena apostar por un esfuerzo que le hubiera salido a¨²n m¨¢s caro.
Quedaba el desenlace final, muy incierto por las molestias de Nadal, que comenz¨® incluso a cojear. Su esp¨ªritu indomable le mantuvo en pista con el empuje de un p¨²blico entregado a su voluntad de inscribir otra gesta en su expediente. Cilic solo deb¨ªa moverle de lado a lado de la pista y lo hizo hasta que su rival sinti¨® que ya no pod¨ªa continuar. Australia tendr¨¢ que seguir esperando para ver al espa?ol alzar su segundo t¨ªtulo, pero cada vez quedan menos oportunidades.