Shapovalov sorprende a Nadal y el n¨²mero 1 tendr¨¢ que esperar

Rafal Nadal no ser¨¢ n¨²mero uno el lunes que viene. Un chaval de 18 a?os famoso por darle un involuntario pelotazo a un juez de silla, Denis Shapovalov, lo ha impedido esta madrugada. El espa?ol se ha encontrado con un reflejo de s¨ª mismo, como aquel Nadal que se subio a las barbas de Federer hace 13 a?os, pero con mejor saque y una capacidad pasmosa para colocar golpes ganadores (49). Esas cualidades, unidas a un atrevimiento, un desparpajo y una resistencia incre¨ªbles, le llevaron hasta su mayor victoria, solo 24 horas despu¨¦s de haber ganado en Montreal a Del Potro. Casi nada. Al final, 3-6, 6-4 y 7-6 (4) en una batalla que dur¨® dos horas y 45 minutos. Nadal tendr¨¢ que esperar a la pr¨®xima semana para intentar superar a Andy Murray en Cincinnati (est¨¢ a 195 puntos) y volver a un trono que no ocupa de julio de 2014. Pero Federer, si Bautista no lo impide, recortar¨¢ distancias en esa pelea. Y Shapovalov, el nuevo h¨¦roe de Canad¨¢, seguir¨¢ so?ando. En cuartos se enfrentar¨¢ a Mannarino sin nada que perder.

Nadal gestion¨® bien el inicio del partido, con veteran¨ªa y paciencia, aplacando el ¨ªmpetu de Shapovalov. En el primer set no se puso nervioso al ver como su rival, tambi¨¦n zurdo, le aguantaba bien el pulso y superaba su presi¨®n al resto con bonitos drives en movimiento. Le fue madurando y en el octavo juego por fin le rompi¨® el saque, con la ayuda de una doble falta y de alg¨²n error de juventud del canadiense. En 37 minutos, el balear cerr¨® el parcial y encar¨® la segunda manga con aparente tranquilidad.

Pero empez¨® mandando Shapovalov y se puso 3-0 tras un break que le dio mucha moral. No lo esperaba Nadal. Despu¨¦s lleg¨® el 4-1, en blanco. Minutos de zozobra sin reacci¨®n. La pelea por el n¨²mero uno, en peligro. Cuando mejor lo ten¨ªa el joven de origen ruso, se arrug¨® un poco y el manacor¨ª tir¨® de casta. Salv¨® su saque en el sexto juego, rompi¨® el de su rival en el s¨¦ptimo e igual¨® en el octavo. La idea era no fallar y comerle la moral al chiquillo. Pero ¨¦ste aguant¨® el chaparr¨®n mejor de lo esperado y se llev¨® el set con un break lazado por medio de un derechazo que no pudo poner en la pista Nadal.

Remar para morir en la orilla

Tocaba remar y el espa?ol lo hizo, pero Shapovalov le cerr¨® bien la puerta en el inicio de la manga definitiva. Con sufrimiento, Rafa sac¨® adelante su servicio.? Despu¨¦s vino un juego ¨¦pico de m¨¢s de 14 minutos que se llev¨® el canadiense porque una dejada de Nadal no super¨® el obst¨¢culo de la cinta. El duelo entr¨® en una fase de intercambios largos y alternativas eternas, con una tensi¨®n que se pod¨ªa cortar con un cuchillo. La resistencia de Shapovalov no parec¨ªa tener l¨ªmite por m¨¢s bolas de break que tuviera en contra. El muchacho no dio su brazo a torcer, Nadal asegur¨® tambi¨¦n sus saques (varios en blanco) y lleg¨® la muerte s¨²bita. La experiencia del campeon¨ªsimo espa?ol ten¨ªa que pesar y al principio lo hizo. Con tres puntos seguidos encarril¨® la suerte y respir¨®. Pero a¨²n se resisti¨® el nuevo ¨ªdolo del pa¨ªs norteamericano. El p¨²blic¨® rugi¨® con el 3-3 y el 4-4, con el 5-4 ya crey¨® en el milagro. Y luego cayeron otros dos puntos y estall¨® el delirio. El n¨²mero uno para Rafa tendr¨¢ que esperar.