Garbi?e Muguruza brilla como un diamante en Pek¨ªn
Gana 7-5 y 6-4 a Bacsinszky y consigue el Premier Mandatory (Masters 1.000). Se pone 4? del mundo cuando asoman las WTA Finals desde el d¨ªa 25.
Garbi?e Muguruza se consagr¨®, definitivamente, como estrella de presente y de futuro de la WTA. La misma semana en la que cumpl¨ªa 22 a?os y lograba su pasaporte para las WTA Finals ¨Cel Masters femenino- consigui¨® levantar su primer trofeo de campanillas: el Premier Mandatory de Pek¨ªn, el equivalente a un Masters 1.000 masculino. En la Diamond Court del recinto ol¨ªmpico, la sonrisa de Garbi?e deslumbr¨® entre unas l¨¢grimas emocionadas tras derrotar a Timea Bacsinszky por 7-5 y 6-4. Un lujo asi¨¢tico el de una jugadora a la que todav¨ªa se le adivina un margen de mejora m¨¢s que considerable.
Porque Muguruza, que ma?ana aparecer¨¢ cuarta del mundo y a un solo punto de la zarina Maria Sharapova, es todav¨ªa una jugadora irregular. Con tremendos picos de sierra durante los partidos como evidenci¨® ante la suiza, 17? del mundo y que saldr¨¢ top-ten.
En la primera manga, la jugadora nacida en Caracas y que se decidi¨® a jugar por Espa?a en 2014 (su padre es vasco, su madre venezolana), no gan¨® un juego con su servicio hasta su tercer turno. Se vio contra las cuerdas 2-5 abajo y desde ah¨ª sell¨® cinco juegos seguidos para ganar 7-5 a la velocidad del Porsche que le gusta conducir por la Ciudad Condal. Congel¨® a la grada china con un grito salvaje y avis¨® que no hab¨ªa llegado hasta ah¨ª para dejar escapar el partido ni el cheque de 973.000 d¨®lares.
En la segunda, tras dos roturas para cada una, la espa?ola estabiliz¨® su juego. Lanz¨® su drive como un cohete, consigui¨® ajustar el rev¨¦s que mont¨¢ndose sobre la bola es como un mazo y con un break para 5-4 cabalg¨® hacia su mayor momento de gloria.
Muguruza hab¨ªa estrenado su palmar¨¦s el a?o pasado en Hobart, pero Pek¨ªn es un t¨ªtulo de peso, s¨®lo un escal¨®n por debajo de los Grand Slam. La final de Wimbledon la subi¨® a los cielos y la baj¨® al infierno por la dif¨ªcil digesti¨®n del boom. Rompi¨® con su entrenador Alejo Mancisidor y realiz¨® una gira mal¨ªsima por Norteam¨¦rica. Se ha unido temporalmente en Asia al franc¨¦s Sam Sumyk (ex de Azarenka y Bouchard) y ahora debe decidir si seguir con su direcci¨®n t¨¦cnica. No le ha ido mal. Hizo final en Wuham y tras retirarse contra Venus con un tobillo da?ado, hasta el lunes no supo si podr¨ªa salir en Pek¨ªn. Las WTA Finals asoman desde el d¨ªa 25 y con Serena Williams descartada y Maria Sharapova entre algodones, la sonrisa de diamantes de Garbi?e es la que m¨¢s brilla.