TENIS
El extenista Bob Hewitt, culpable de violar a menores
El extenista sudafricano ha sido declarado culpable de dos violaciones y un tercer delito de abusos sexuales a tres alumnas menores de edad.
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El extenista sudafricano Bob Hewitt, ganador de nueve Grand Slam en dobles en las d¨¦cadas de 1960 y 1970, fue declarado hoy culpable de dos violaciones y un tercer delito de?abusos?sexuales a tres alumnas menores de edad.
El juez Bert Bam, del juzgado de Palm Ridge (este de Johannesburgo), consider¨® probado que el exdeportista, de origen australiano, abus¨® sexualmente de tres de sus alumnas, de entre 12 y 14 a?os, cuando era su profesor?de tenis en las d¨¦cadas de 1980 y 1990.
El tenista -ganador de nueve Grand Slam en dobles y de otros seis t¨ªtulos en dobles mixtos en las d¨¦cadas de 1960 y 1970- se hab¨ªa declarado inocente de todos los cargos.
Hewitt conocer¨¢ la pena en su pr¨®xima comparecencia ante el juez, el 17 de abril en el Tribunal Superior de Pretoria.
El juez Bam concedi¨® al condenado la libertad condicional solicitada por la defensa, a cambio del pago de una fianza de 10.000 rands, uno 765 euros.
Seg¨²n las condiciones impuestas por el tribunal, Hewitt deber¨¢ esperar a la sentencia en su casa de la provincia sudafricana del Cabo Oriental, en el sureste del pa¨ªs, si bien podr¨¢ visitar a su hija en Johannesburgo "Las pruebas del fiscal contra el acusado son abrumadoras", dijo
el magistrado Bam durante la lectura del veredicto.
"Las tres demandantes tienen derechos b¨¢sicos. El tiempo no hace desaparecer los delitos. Una persona culpable no debe quedar impune", a?adi¨® el juez, en presencia de tres v¨ªctimas en la sala.
Bam concluy¨® que Hewitt manipul¨® e intimid¨® a las adolescentes antes de realizar actos sexuales con ellas.
Hewitt, de 75 a?os, obtuvo la nacionalidad sudafricana en 1967, al casarse con una mujer del citado pa¨ªs.
La esposa de Hewitt testific¨® a favor de la inocencia de su marido, al que ha acompa?ado durante todo el proceso, que comenz¨® en febrero y en el que han prestado declaraci¨®n diez testigos.