Federer, el m¨¢s grande

Bajaba de las nubes de Wimbledon la bola que hab¨ªa enviado all¨ª el golpe final de Roddick, exhausto, y Roger Federer sub¨ªa al cielo. Pero, en estos tiempos de mercadeo, la verdadera gloria quedaba reservada a Nike: lo primero que hizo Federer fue ir corriendo a su silla y sacar una delicada chaquetilla, cuidadosamente plegada y con el n¨²mero 15 bordado: 15 Grand Slams. Fuera del c¨ªrculo ¨ªntimo de Federer, nadie hubiera visto la chaquetita si Federer no hubiera ganado.

Genios.

Al mismo tiempo, las primeras im¨¢genes que sucedieron al partido en las grandes cadenas internacionales fueron las de un elaborad¨ªsimo spot comercial, tambi¨¦n de Nike, claro, con sus grandes genios, Pete Sampras, John McEnroe, Tiger Woods y Michael Air Jordan, haciendo las correspondientes risas: algo as¨ª hace Isabel Preysler por Nochevieja.

Federer subi¨® a los cielos de los 15 Grand Slams y del primer puesto de la lista mundial, en un d¨ªa sellado por la inevitabilidad: Roddick se dispar¨® a la sien en la muerte s¨²bita del segundo set. Ah¨ª, Andy tuvo 6-2, cuatro set points y dos servicios para ponerse dos sets a cero. Todo in¨²til: cuando Federer le hizo el 6-6, Roddick, avergonzado, regres¨® a la pista a una posici¨®n equivocada, que le tuvo que corregir el ¨¢rbitro, Lars Graf. Henry Kissinger, Premio Nobel de la Paz, sonre¨ªa astutamente. Seis puntos seguidos, juego y set para Federer: gracias, Mr. Roddick, de nada.

Tan f¨¢cil lo vio Federer tras llevarse el tercer set en otra muerte s¨²bita, que decidi¨® arriesgar lo m¨ªnimo, mantenido por la fusta de su servicio: 50 aces. Casi sin golpe de derecha, pero a la carga ante un Federer parado, Roddick (27 aces) gan¨® el cuarto set. Y el quinto set: Federer serv¨ªa por delante, y en esas circunstancias, s¨®lo se conoce un hombre que le pueda ganar una final en Wimbledon. Roddick no es ese hombre. Extenuado, y cara al sol en el juego 30 de un set que dur¨® 95 minutos, Roddick termin¨® equivoc¨¢ndose, entre ca?azos y l¨¢grimas. Federer subi¨® al cielo de los Slams y de Nike. El Federer de los 15 Grand Slams ya es el m¨¢s grande: as¨ª es, porque s¨®lo existe un hombre que le pueda ganar en este tipo de finales. Pero ese hombre no jug¨® este Wimbledon.