Bale, el futbolista que teletrabaj¨® desde la chilena de Kiev
Te vas Bale. En realidad, te fuiste hace mucho tiempo. Exactamente tras la noche gloriosa de tu partidazo en la final de Kiev. Ese d¨ªa metiste un golazo para la historia al Liverpool y un segundo gol, con ayuda del gran Karius, que dibuj¨® tu gran cierre de fiesta. Pero han pasado cuatro a?os desde entonces y no recuerdo una solo foto tuya con una gran acci¨®n jugando con esa camiseta que s¨¦ que amabas de ni?o.
En tu carta est¨¢s cari?oso y reconoces que viste cumplido tu sue?o cuando fichaste en 2013. Recuerdo que me hice una foto contigo en uno de los restaurantes del Bernab¨¦u despu¨¦s de la comida con la que iba ser tu nueva directiva, con Florentino a la cabeza. Se te ve¨ªa con la ilusi¨®n de un cr¨ªo y lo demostraste en un primer curso imperial. Golazo hist¨®rico en la final de Copa al Bar?a en Mestalla (Bartra no lo olvida) y gol del 2-1 al Atleti del Cholo en la pr¨®rroga triunfal de Lisboa con la D¨¦cima.
Luego empezaste a ser irregular, pero metiste muchos goles, la mayor¨ªa de bella factura por tu poderosa zancada y tu zurda en modo-ca?¨®n. Zidane empez¨® a desconfiar de ti y de tu compromiso. Lleg¨® tu suplencia en la final de Cardiff, tu tierra, al estar renqueante de una lesi¨®n, y un a?o m¨¢s tarde otra vez al banquillo en la famosa noche de Kiev. Fuiste clave para ganar la 13 y te lo agradecermos siempre. Pero esa noche paraste tu reloj pese a la marcha de Cristiano. Sin el portugu¨¦s de oro, Benzema dio cinco pasos adelante y t¨² cinco atr¨¢s. Desde entonces has sido un jugador que se ha ejercitado desde el 'teletrabajo', porque en el terreno de juego no te hemos visto apenas. Bueno, s¨ª, te hemos visto dejarte la vida con Gales y en los coquetos campos de golf de Madrid.
Te vas, pero no nos dejas tocados de la moral como s¨ª nos ha pasado con Marcelo. O incluso con Isco. T¨² eres como eres. Ni siquiera te hemos escuchado hablar en espa?ol en estos nueve a?os a la afici¨®n del Madrid, esa misma que seg¨²n tu agente "es repugnante", T¨² guardaste silencio ante ese ataque inadmisible y eso duele. Elegiste vivir en un mundo paralelo (cobrando como el que m¨¢s, eso s¨ª). Te vas para siempre del Bernab¨¦u. Bye, bye, Gareth.