Milagros siempre, no
Por mucho que el Madrid est¨¦ acostumbrado a la taumaturgia, cuando te enfrentas a rivales fuertes, es m¨¢s conveniente apostar por la estrategia y el sentido com¨²n. Todo el mundo sabe que el City de Guardiola basa su ¨¦xito en la cantidad de excelentes peloteros que acumula en campo rival, capaces de mover el bal¨®n a toda velocidad hasta encontrar el camino de la porter¨ªa. Si en ese panorama los chicos de Pep encuentran pocos obst¨¢culos te pueden marear, como hicieron con los blancos en varios tramos del partido. La apuesta de Ancelotti por Rodrygo arriba desguarneci¨® el medio y dej¨® a Kroos muy solo en una zona de riesgo, donde De Bruyne y Bernardo Silva se turnaron para buscarle los espacios y las cosquillas al alem¨¢n.
El belga en concreto camp¨® a sus anchas por el c¨¦sped y descoloc¨® todo el sistema defensivo de los blancos, que no llegaban a tiempo ni de hacer faltas. Teniendo en cuenta que el milagro ya se ha producido en la ida, es cuesti¨®n de que Carletto prepare mejor el partido del Bernab¨¦u porque lo prioritario debe ser evitar que los blues hagan su juego y creen tantas ocasiones claras como en M¨¢nchester. Lo de salir a morder no consiste en poner m¨¢s delanteros, sino en equilibrar tu equipo para impedir que el rival te someta. Y luego, que la pegada de Benzema y Vinicius se encargue de cabrear a Guardiola.