La fe del Betis y la ley de Pellegrini
El Betis vive su ansiado d¨ªa de los elegidos. Esper¨® 17 a?os para tenerlo delante. Hubo esperanzas, ca¨ªdas, despertares y l¨¢grimas, demasiadas l¨¢grimas en ese camino hasta una final que quiere medir su capacidad por saltar m¨¢s alto. Ganar sirvi¨® para llegar y ganar es la mejor v¨ªa para continuar. Lo sabe un plantel que aprendi¨® a hacerlo. Lo sabe una afici¨®n que comprendi¨® que pod¨ªa verlo. La Cartuja tendr¨¢ tintes verdiblancos a las puertas de un cierre de campa?a que ya est¨¢ decorado con este 23-A. El Betis sue?a con transformarlo en el escenario de su tercera Copa del Rey. En parte de su historia. En un mordisco de esperanza que estuvo contenido demasiado tiempo.
Para Pellegrini manda el f¨²tbol. Siempre fue as¨ª. Lleg¨® a Heli¨®polis para d¨ªas como hoy. Aunque pareciese entonces el ¨²nico en creer en ello. Ahora todos lo hacen. Su directriz la abandera Canales. ?l fabrica los hilos de luz de un equipo que no quiere miedos en escena. Tiene a su lado a Fekir, la tecla de lo imprevisible. Buscar¨¢ a ?lex Moreno, el cazador de espacios improbables. Juanmi pretende vestirse de nueve y Borja Iglesias de h¨¦roe. Hay talentos innatos y nadie quiere ejecutar pasos torpes de baile en plena noche de conquistas. Pellegrini invit¨® a todos. Pretende que Joaqu¨ªn amague y suspire como en 2005. Que Bartra sea Bartra. Que Tello le contradiga. Que William Carvalho sea la calma. El Ingeniero pint¨® los trazos de una historia que ¨¦l mismo quiere convertir en cuento.