El Mundial de la infamia
Hab¨ªa que hacer caja y qui¨¦n mejor que Rusia y Qatar para facturar de nuevo.

Algo se rompe en el deporte cuando detr¨¢s de la competici¨®n no hay un esp¨ªritu infantil. Es la inocencia deportiva la que ingeni¨® por primera vez un equipo, un partido, una selecci¨®n, una copa o lo m¨¢ximo, un mundial de los mejores contra los mejores, como si fuera el honor del patio del colegio. Y desde hace demasiadas d¨¦cadas son mentes adultas las que gestionan todo en el f¨²tbol. No hay marcha atr¨¢s en el Mundial de la infamia en Qatar, el que desat¨® en 2015 una operaci¨®n del FBI contra la FIFA que llev¨® a la c¨¢rcel a casi todos los 24 ejecutivos que decidieron llevar la Copa del Mundo a Rusia en 2018 y despu¨¦s a Qatar en 2022 en una ins¨®lita doble votaci¨®n. Se repartieron 150 millones de d¨®lares en sobornos.

Los ni?os cambiar¨¢n cromos mientras se juegan partidos en pleno diciembre, en d¨ªa laboral por la ma?ana. La tetracampeona Italia, que en una intrascendente fase de clasificaci¨®n solo encaj¨® dos goles en contra, no estar¨¢ porque tuvo un mal d¨ªa contra Macedonia del Norte. Pero el pa¨ªs anfitri¨®n, que hasta hace 10 a?os ten¨ªa las carreras de camellos como principal entretenimiento, ser¨¢ cabeza de serie. Estar¨¢n Canad¨¢, Nueva Zelanda o Costa Rica¡ Apasionante. Y encima quieren que sea cada dos a?os. Tienen tanta prisa por llegar a ninguna parte.
La historia explica bien qu¨¦ ha pasado para que nos hayan robado este Mundial. Fue un comerciante de armas quien invent¨® todo en los 70. Joao Havelange convirti¨® los Mundiales en un gran negocio aumentando los participantes. En Espa?a 82 se pas¨® de 16 a 24 equipos gracias a una votaci¨®n influenciada por el hijo del fundador de Adidas, Horst Dassler, llevando el dinero de las tres rayas a las selecciones africanas a cambio de votos. Una cultura corrupta que acab¨® quebrando en mundiales deficitarios como Sud¨¢frica y Brasil. Hab¨ªa que hacer caja y qui¨¦n mejor que Rusia y Qatar para facturar de nuevo. Para vender a Qatar hubo que deshacerse de EEUU, y como dice el documental argentino FIFA Gate dirigido por Ezequiel Fern¨¢ndez Moores, "EEUU no tiene a Messi pero tiene al FBI".