Alienaci¨®n parental azulgrana

Pap¨¢, ?y si el Madrid me quiere fichar? Daniel tendr¨ªa unos siete a?os cuando me dirigi¨® esta pregunta acompa?ada de una mirada angustiosa mientras ve¨ªamos un partido del Bar?a en el sal¨®n. Jugaba por entonces en los benjamines del Pontevedra. Como todos los Fortes est¨¢ habituado a repartir sus querencias futboleras, que malo ser¨¢ que si pierda el Bar?a no ganen los de Pasar¨®n, o viceversa. As¨ª sufrimos un poco menos. El pinchazo de ¨²ltima hora contra el Coruxo el pasado domingo que nos puede birlar el ascenso (una vez m¨¢s) fue el proleg¨®meno del 0-4 del Bernab¨¦u. De hecho tuve que apurar un largo sorbo de JB para poder desentra?ar su significado insoldable antes de soltar una carcajada que alter¨® a mi mujer. Ella dice que estoy alienando a los ni?os con esto del f¨²tbol y el Bar?a, y sin duda tiene raz¨®n.

El chaval me estaba transmitiendo su angustia infantil por si llegaba el momento en que el Madrid quisiera ficharlo. Tendr¨ªan que ver su carita de pena, con sus siete a?itos. Vestir de blanco y jugar obligado en el Bernab¨¦u, como una condena por toda la eternidad. Le sosegu¨¦ como pude. 'Tranquilo que si el Madrid quiere ficharte, puedes renunciar y que el Pontevedra te busque un hueco'. Respir¨® profundo, como aliviado de una carga insoportable, atac¨® de nuevo el bol de las patatas fritas y volvi¨® a ser el de siempre.