Modric no quiere rotar
Luka Modric volvi¨® a ser el mejor jugador de campo del equipo en un choque en el que, como era previsible, hab¨ªa que cambiar el traje de gala por el mono de currante. Con medio mundo intentando convencer a Carletto de la necesidad de que el croata se tome un respiro de vez en cuando, Luka demuestra semana tras semana que sus 36 a?os no se reflejan en el tapete. Es cierto que el d¨ªa del PSG se le vio igual de superado que a todo el equipo, pero parece evidente que fue m¨¢s una cuesti¨®n de mal planteamiento y poco f¨²tbol que de pocos pulmones. En Vallecas, Modric puso orden y se hinch¨® a correr cuando el equipo estaba algo perezoso y volvi¨® a salir de un campo ovacionado por la afici¨®n rival y abrazado por su entrenador.
Si Ancelotti no ha encontrado el momento de darle descanso cuando el calendario estaba m¨¢s apretado, ahora con un partido a la semana es evidente que va a jugarlo casi todo. Despu¨¦s de la noche aciaga de Par¨ªs y con el gen competitivo que adorna al crack croata, imagino que estar¨¢ deseando que los d¨ªas pasen lo m¨¢s r¨¢pido posible para tomarse la venganza deportiva ante los franceses. Estamos poco acostumbrados a ver una mala actuaci¨®n de Modric, pero que tenga dos malos partidos casi consecutivos es pr¨¢cticamente imposible. Su f¨²tbol y su liderazgo tienen que ser una de las claves para seguir en la Champions. Y Luka, consciente de su importancia en el c¨¦sped y en el vestuario, no se cansa de predicar con el ejemplo.