Odriozola no ser¨¢ otro Illarramendi
El Bernab¨¦u te da vida y te mata. Aguantar la presi¨®n de un estadio que rezuma historia por sus cuatro costados no est¨¢ al alcance de cualquiera. En el arranque de los Gal¨¢cticos, a?o 2000, vi c¨®mo un jugadorazo como Flavio Concei?ao se encog¨ªa cada vez que saltaba al c¨¦sped de Chamart¨ªn. En Riazor y con la 'canarinha' se sent¨ªa un h¨¦roe del f¨²tbol. En el Madrid, un impostor que no justificaba los 4.000 millones de las antiguas pesetas pagadas por ¨¦l al Depor de Lendoiro. Con los guipuzcoanos ha habido de todo. El gran triunfador fue Xabi Alonso, un jugador total que lleg¨® en 2009 en aquel verano m¨¢gico junto a Cristiano, Kak¨¢ o Benzema. A Xabi le sentaba de lujo la camiseta. Desde el primer d¨ªa impuso su magisterio. Su marcha al Bayern fue un mazazo para todos los madridistas.
Despu¨¦s lleg¨® su paisano Illarramendi para reeditar sus ¨¦xitos, pero jam¨¢s lo logr¨®. Se le recuerda m¨¢s por su ruidosa presentaci¨®n en el Palco del Bernab¨¦u con sus colegas de Motrico (llenaban un minib¨²s) que por sus conquistas en el verde. Illarra es un buen chaval, pero la presi¨®n del Madrid le acogot¨®. En la Real, lesiones aparte, vuelve a ser feliz. No creo que sea el caso de Odriozola. El 'Hugh Grant' espa?ol ha hecho dos Erasmus en Alemania y en Italia para crecer. Como persona y futbolista. Corre como el rayo y ha mejorado en defensa. Surcar¨¢ la banda del nuevo Bernab¨¦u.