Los bombazos de la era Carlsen
Uno de los grandes nombres que ha dejado el deporte en este final de a?o ha sido el de Magnus Carlsen, que hace dos semanas se proclam¨® campe¨®n del mundo de ajedrez por quinta vez. Su dominio, a sus 31 a?os, es tan grande, que muchos especialistas comparan ya su dimensi¨®n con la de Gari Kasp¨¢rov, posiblemente el mejor ajedrecista de la historia. Carlsen reedit¨® su corona con m¨¢s facilidad de la prevista, tras aplastar al ruso Ian Nepomniachtchi, por 7,5-3,5. Su victoria, m¨¢s que motivar al noruego, ha tenido la consecuencia contraria. El campe¨®n ha asegurado en unas recientes declaraciones que no defender¨¢ su t¨ªtulo en la pr¨®xima edici¨®n, salvo que el retador sea Alireza Firouzja, el iran¨ª de 18 a?os, nacionalizado franc¨¦s, que aparece como n¨²mero dos del escalaf¨®n, con una prometedora proyecci¨®n. Una nueva motivaci¨®n para el indiscutible rey. Mientras que se resuelve este enigma, Carlsen se ha vuelto a poner estos d¨ªas frente al tablero para disputar los Mundiales de ajedrez r¨¢pido y rel¨¢mpago, en busca de un triplete que ya conquist¨® en 2014 y 2019.
El reinado de Carlsen, que arranc¨® en 2013, cuando ten¨ªa 22 a?os y 11 meses, convive con un resurgimiento popular del ajedrez. En parte se debe a su figura, la de un joven f¨¢cilmente identificable con su generaci¨®n, moderno y futbolero, que ha abierto el juego a un amplio abanico de la sociedad y ha roto estereotipos de intelectualidad. Su periodo ha coincidido tambi¨¦n con otros dos bombazos. Por un lado, el crecimiento de las partidas digitales, que aumentaron durante el confinamiento por la pandemia. Por otro, y casi a la par, por la serie de televisi¨®n Gambito de dama, que tambi¨¦n ha reclutado nuevos afines. Todo ello, metido en una coctelera, ha elevado el inter¨¦s por la pr¨¢ctica del ajedrez¡ Y ahora tambi¨¦n por ese pulso Carlsen-Firouzja, que ya despierta una enorme expectaci¨®n.