Golazos de museo

Por la puerta grande. As¨ª es como se pasa a los octavos de final. Ganando con autoridad, con un Bernab¨¦u festivo y feliz, con dos golazos de museo, con sus apercibidos que salen limpios de tarjetas (Casemiro y Mendy), sin lesionados y con la novena victoria consecutiva en el bote. Las buenas noticias se le acumulan a la tropa de Ancelotti antes de ese derbi electrizante del pr¨®ximo domingo, que pondr¨¢ el santuario de La Castellana a reventar. La clasificaci¨®n de los vecinos para octavos a?ade m¨¢s morbo y cach¨¦ a un partido que decidir¨¢ parte de la suerte de esta Liga, que sigue te?ida de blanco. Y en la Champions prefiero que siga adelante el pelot¨®n acorazado del Cholo, dado que si nos cruzamos a lo largo del camino en lo que queda de Copa de Europa ya sabemos cu¨¢l ser¨ªa el desenlace. Tiren de hemeroteca y me ahorro recordarles c¨®mo nos ha ido con el Atleti en nuestros ¨²ltimos enfrentamientos. Este Madrid de Carletto no le teme ahora mismo a nada ni a nadie. Que llegue ya el bombo del lunes. Ojal¨¢ nos toque el PSG de los jeque-d¨®lares. Lo digo de verdad. Tengo muchas ganas de ponerles en su sitio. Mbapp¨¦ lo asumir¨ªa sin rencor, dado que en realidad ser¨ªa v¨ªctima del pr¨ªncipe azul con el que viene so?ando desde que apenas ten¨ªa dientes de leche (su c¨®mic habla por ¨¦l). Nos espera un sorteo muy morboso y divertido...

Pobre Inter. Cierto que es un grande de Europa y que en este mismo estadio conquist¨® hace 11 a?os la Champions al derrotar en la final al mism¨ªsimo Bayern con dos goles de Diego Milito. Era aquel Inter de Mourinho que rein¨® en Europa hasta el punto de tumbar al Bar?a de Guardiola. Pero ese Inter tiene un problema en la m¨¢xima competici¨®n continental. Cuando le toca el Madrid ya sabe lo que le espera: derrota segura. El Bernab¨¦u es su mazmorra donde siempre termina mordiendo el polvo y dolorido. Un servidor solo recuerdo aqu¨ª un triunfo interista. Fue un Trofeo Bernab¨¦u en el que Adriano solt¨® un zapatazo salvaje que entr¨® por la escuadra. Pero en la antigua Copa de Europa, en la UEFA y en la actual Champions solo recuerdo festines, triunfos contundentes y mucha jerarqu¨ªa en el campo. En esta ocasi¨®n fueron Kroos y Asensio los que tradujeron ese peso de la historia. Fueron dos goles de museo. El del alemanazo del Madrid (Toni) fue producto de su excelso estado de forma. Zurdazo ajustado desde la frontal con la elegancia de un cisne y la precisi¨®n kamikaze de un caza japon¨¦s (hoy justo se han cumplido 80 a?os del bombardeo a Pearl Harbor). Kroos est¨¢ en su segunda juventud y jam¨¢s le vimos jugar tanto y tan bien. La arruga es bella.

Y marc¨® Marco. El balear es lo que tiene. Si saca el lienzo y se ve inspirado te dibuja la Gioconda en un pis pas. Su zurdazo parab¨®lico revent¨® el palo derecho de Handanovic, que se qued¨® ensimismado siguiendo la trayectoria de la pelota como se quedan los ni?os mirando en la playa el vuelo de las gaviotas. El esloveno ni la oli¨®. Y ver a Arturo Vidal mordiendo el polvo y agachar la cabeza (tambi¨¦n lo hizo con el Bar?a, con el Bayern...) no tiene precio. El Inter lo intent¨®, pero este Madrid es un martillo pil¨®n. Sus rivales proponen, pero ¨¦l dispone.

Militao es el ¡®boss¡¯. Me quito el sombrero ante el brasile?o. El nuevo Pepe ofreci¨® un recital otra vez. Cerr¨® todas las v¨ªas hacia Courtois, tap¨®, presion¨®, se anticip¨®, gan¨® todos los duelos, subi¨® al ataque, intimid¨® y hasta provoc¨® la roja de Barella, que acab¨® desquiciado e impotente ante la autoridad del nuevo jefe de la zaga madridista. Militao es como Vinicius. Ha respondido a las burlas y las cr¨ªticas desde la ejemplaridad. Su firmeza, con Alaba de socio, es una gran noticia para todos. El Bernab¨¦u vive d¨ªas de vino y rosas. Que dure.