El Reglamento est¨¢ en manos de botarates
Los l¨ªos con el fuera de juego empezaron a ra¨ªz de que algunos entrenadores organizaran a sus defensas para que se adelantaran brusca y coordinadamente a fin de dejar a un atacante incauto adelantado. Lo hac¨ªa bien ya en los sesenta el Estudiantes de la Plata; en Europa lo practic¨® con ¨¦xito en la misma ¨¦poca Sinibaldi, con el Anderlecht; Rinus Michels fue luego maestro en eso. Poco a poco se extendi¨®. Se consider¨® una forma desleal de sacar ventajas del Reglamento y de esa idea surgi¨® la recomendaci¨®n a los linieres de no levantar la bandera en caso de duda, y m¨¢s tarde la decisi¨®n de que en caso de estar el atacante ¡®en l¨ªnea¡¯ no hab¨ªa fuera de juego.
Hasta ah¨ª¡ Pero esa bola de nieve ech¨® a rodar y el remedio fue peor que la enfermedad. Se pas¨® a que no hab¨ªa que se?alar fuera de juego hasta que el jugador adelantado no recibiera la pelota. Se elabor¨® una dif¨ªcil teor¨ªa de posici¨®n, influencia y posici¨®n m¨¢s influencia, mera paja mental, pues el jugador en posici¨®n adelantada influye por definici¨®n. Influye en la mirada del portero, influye en la colocaci¨®n de la defensa, influye por el mero hecho de su presencia inquietante. Y si una vez metido en posici¨®n adelantada se muestra activo, pendiente para intervenir, est¨¢ haciendo algo desleal con el juego y debe ser sancionado con falta.
Por remediar el ¡®fuera de juego fabricado¡¯ se ha acabado en el absurdo de que el linier no levanta ¡®por si acaso¡¯ pero luego levanta cuando el atacante ha chutado fuera o el portero ha parado. A cambio, la tolerancia con el ¡®en l¨ªnea¡¯ ha mutado, v¨ªa VAR y sus sexadores de pollos, en que te marcan un fuera de juego por una u?a, lo contrario de lo que se pretend¨ªa en origen. En esa tormenta de confusiones pasan cosas como el c¨®rner no c¨®rner de Unai porque actu¨® condicionado por la proximidad de Benzema, mientras en el gol de Mbapp¨¦ no se consider¨®, en el intento de corte de Eric Garcia, la posici¨®n adelantada y activa del franc¨¦s. Esto est¨¢ en manos de botarates.