Pedroso repar車 el juguete roto
Iv芍n Pedroso era un saltador sufrido y admirado por la afici車n espa?ola. Las dos cosas no son excluyentes. Sufrido, porque se cruz車 en el camino del malogrado Yago Lamela, al que priv車 del t赤tulo mundial en aquel gal芍ctico concurso de Maebashi 1999, a pesar de haber volado a 8,56. Y admirado, por lo mismo, por exhibir su car芍cter de campe車n ind車mito, capaz de llegar a 8,62 en el 迆ltimo brinco para conquistar un oro que se le esfumaba. Pedroso, campe車n de longitud en S赤dney 2000, fue cocinero antes que fraile. Y de los muy buenos. Esa experiencia la traslada ahora como entrenador a un grupo de calidad en Guadalajara, con m谷todos muy personales, que empiezan por no madrugar para estar bien descansados, por la m迆sica como motivadora compa?era, con mucho di芍logo con sus atletas, con sesiones desestresantes en el Bodeg車n de Sancho... Eso s赤, siempre con el trabajo, la ambici車n y la excelencia como banderas. El merengue no es incompatible con los buenos resultados. Al contrario, ayuda a alcanzarlos.
Yulimar Rojas lleg車 a ese Team Pedroso tras contactar v赤a Facebook. ※Si quieres trabajar conmigo, vente a Espa?a§, le dijo Iv芍n. Un diamante que, despu谷s de pulido, ha triturado el r谷cord mundial de triple con 15,67. La venezolana carga todos los d赤as a la Fuente de la Ni?a con un gigante altavoz de diez kilos para amenizar con ritmo caribe?o. Yuli es la alegr赤a del equipo. Y un referente para su compa?era de entrenamientos, Ana Peleteiro, a la que ha hecho mejor competidora con el roce diario. Si saltas con la mejor y tienes al mejor entrenador, la progresi車n es inevitable, siempre que no descuides tu parte. En eso, Pedroso es inflexible. Ya se lo dijo cuando acept車 guiar sus pasos: ※Si no eres finalista en el Europeo, est芍s fuera§.
Ana Peleteiro hab赤a sido una perla del atletismo espa?ol desde muy joven, desde que se proclam車 campeona mundial sub-20 con 16 a?os. Luego aterriz車 en la Blume, en Madrid, pero all赤 se desorient車, no fue capaz de confirmar su calidad, ni de progresar# ※Era un juguete roto§, reconoce la gallega. Ese juguete lleg車 a las manos del m赤tico saltador cubano, al Team Pedroso, y hoy puede presumir de tres medallas europeas, una de ellas de oro, una mundial y este bronce ol赤mpico, en una de las pruebas m芍s igualadas y de mayor nivel del circuito atl谷tico. Ana es ahora feliz. Y gracias a esa felicidad y a ese equilibrio personal es capaz de batir dos veces el r谷cord de Espa?a en la competici車n de su vida y de volar m芍s lejos que nunca.