Cuidados b¨¢sicos para mantener la bicicleta en buen estado
Llevar un buen mantenimiento de la cadena y los pi?ones, y vigilar que la humedad no haga estragos, mejorar¨¢n mucho la vida de nuestra m¨¢quina
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Uno de los pocos asuntos que todav¨ªa no hemos tratado en este espacio es el relacionado con la mec¨¢nica en la bicicleta. Y realmente, estamos hablando de una parte important¨ªsima. El mantenimiento de la bici es fundamental, primero, para que funcione correctamente. Y segundo, para que nos dure. Que al final un buen mantenimiento tambi¨¦n se traduce en un ahorro econ¨®mico.
Por tanto, vamos a ver muy r¨¢pido un par de cositas para reci¨¦n iniciados que tienen poca idea de mec¨¢nica. Consejos de ¡®andar por casa¡¯, pero que en realidad se aplican menos de lo deseado y al final desembocan en un mal estado de la bici. Lo que aumenta el riesgo de problemas mec¨¢nicos y, por tanto, de llegar incluso a quedarnos tirados un d¨ªa en la carretera.
Cadena, plato y pi?ones
La cadena es parte fundamental de la bici. Hay que tener en cuenta que en la carretera vamos expuestos a cualquier inclemencia meteorol¨®gica o elemento que haya en sobre el asfalto. Y si nosotros vamos, nuestra cadena tambi¨¦n. Charcos, manchas de aceite, polvo con el viento e incluso part¨ªculas de arena en zonas de costa como la m¨ªa. Todo eso ensucia la cadena y aumenta la fricci¨®n con el resto de piezas.
Por tanto, el engrasado debe ser peri¨®dico. Hay quien lo hace todos los d¨ªas¡ y no limpia la cadena antes de engrasarla. Y al final lo que est¨¢ haciendo es aplicar una capa de aceite o cera sobre una cadena sucia. Es vital desengrasarla primero, sobre todo si sales en MTB, que estar¨¢s lidiando con la tierra y el polvo a diario. En realidad, no es necesario engrasar despu¨¦s de cada salida. Con unos 250 kil¨®metros o una vez en semana -si haces menos de esa distancia- es suficiente.
Otra cosa importante es que la cadena tiene una vida ¨²til limitada. ?Cu¨¢nto? Pues tampoco hay una regla fija. Hay quien dice que a partir de los 6.000 kil¨®metros es necesario quitarla s¨ª o s¨ª. Otros dicen que dura hasta los 10.000, y tambi¨¦n hay quien dice que a partir de los 3.000 ya empieza a estirarse y puede afectar a los dientes de los pi?ones. En realidad, va a depender mucho del mantenimiento que le hagamos y la ¡®tralla¡¯ que le demos. Pero no, no se puede aguantar una cadena a?os y a?os, porque al final se estira, hace da?o a los dientes de pi?ones y platos, luego se producen los famosos ¡®saltos¡¯ de cadena y, finalmente, ante un cambio brusco puede romperse. Y ah¨ª la habremos liado. Para ayudarnos, podemos usar medidores de cadena que nos indican qu¨¦ grado de estiramiento tiene y si ¨¦ste ha llegado a su l¨ªmite.
En cuanto a platos y pi?ones, lo principal que hay que vigilar es, primero, que tampoco se le peguen part¨ªculas de polvo o tierra, y que el uso de la cadena no lleve a que se les deformen los dientes. Volvemos a lo mismo: no se puede decir que haya que hacerlo cada X o Y kil¨®metros, sino ir viendo el desgaste que acumulan.
Normalmente, los pi?ones no tienen los dientes puntiagudos del todo, sino que acaban en una peque?a superficie aplanada. Si al ver los pi?ones -o el plato- nos damos cuenta de que ese final aplanado se va convirtiendo en puntiagudo -como si tuviese ¡®mordiscos¡¯- significa que el desgaste empieza a ser notorio. Eso har¨¢ que la cadena ¡®salte¡¯ una vez llegue a ese diente. Entonces ser¨¢ momento de cambiar tambi¨¦n el cassette. A m¨ª, en general, me suelen aguantar un par de a?os. Y como desde que naci¨® Valeria no me he subido a la bici, seguro que este que tengo ahora me dura m¨¢s.
La bici, mejor seca
A la hora de lavar la bici, muchas veces tendemos a hacer un secado muy superficial o, directamente, dejar que el aire ambiente haga su trabajo secando la m¨¢quina. Pero hay un mont¨®n de recovecos y peque?as piezas que en muchos casos se nos quedan mojadas. Una vez probablemente no pase nada pero, si en cada lavado hacemos lo mismo, con el tiempo acabaremos oxidando muchas piezas y rodamientos de la bici.
Es de vital importancia secarla en condiciones, de manera que evitemos humedades. Tambi¨¦n es muy positivo guardarla en alg¨²n lugar a cubierto del sol y e condiciones secas. La humedad y nuestra bici, ya lo hemos visto, no se llevan nada bien. Por tanto, si nos ¡®comemos¡¯ un d¨ªa de lluvia, secar el cuadro, los frenos, las manetas y las distintas piezas se hace condici¨®n irrenunciable.
Otro d¨ªa hablaremos en este tema sobre los frenos, que tambi¨¦n tienen lo suyo y son un elemento primordial, sobre todo teniendo en cuenta que circulamos en carretera abierta y con otros muchos veh¨ªculos -y m¨¢s ahora en verano-. De momento, con estas pocas pautas sencillas podemos asegurar una vida bastante m¨¢s saludable para tu bici.