Suecia posee m¨¢s calidad que en el Mundial 2018
Menos amenaza ofensiva, pero m¨¢s que en Rusia. La lesi¨®n de Ibrahimovic y el positivo de Kulusevski dejan a Suecia sin dos de sus jugadores m¨¢s desequilibrantes en ataque. No es un detalle menor, ya que su idea de juego parte del orden defensivo y pasa por poseer una gran efectividad de cara a la porter¨ªa rival en sus ataques verticales. Pero incluso con esas dos bajas poseen m¨¢s calidad para inventar que en el Mundial de Rusia, cuando alcanzaron los cuartos de final. Entonces a¨²n no ten¨ªan a Alexander Isak, Robin Quaison o Jordan Larsson, delanteros m¨¢s autosuficientes que el veterano Marcus Berg, que depende m¨¢s de que le sirvan buenos balones. Ni tampoco estaba Kristoffer Olsson, un medio centro que les permite jugar con m¨¢s claridad y transformarse en un equipo que no reh¨²ya tanto el papel de dominador en ciertas fases de los partidos.
El 4-4-2 es sagrado. Janne Andersson responde al perfil de entrenador n¨®rdico de toda la vida. En los pa¨ªses escandinavos la influencia del juego brit¨¢nico ha sido siempre notable, y m¨¢s en los tiempos en los que se form¨® el veterano seleccionador, que tiene ya 58 a?os. Toda su carrera de jugador y tambi¨¦n de entrenador la ha realizado en Suecia. Y sigue el libreto imperante en el norte de Europa: dos l¨ªneas de cuatro, dos puntas -a poder ser uno m¨¢s m¨®vil y otro m¨¢s f¨ªsico-, juego bastante directo y gran importancia del bal¨®n parado. A los jugadores de m¨¢s desborde, como Forsberg o Claesson, se les ubica en la banda y se les pide sacrificio para seguir al lateral rival. Es dif¨ªcil cogerles desordenados o hacerles da?o al contragolpe, ya que rara vez arriesgan en la zona defensiva.
El interesante hijo de Larsson. Jordan Larsson es una de las novedades de la lista sueca con respecto a grandes citas anteriores. Su muy buena temporada en la liga rusa, en la que ha marcado quince goles y ha repartido cinco asistencias con la camiseta del Spartak de Mosc¨², le ha valido la convocatoria. Posee un instinto goleador que recuerda al de su padre Henrik, hoy t¨¦cnico asistente del Barcelona y ex jugador del conjunto catal¨¢n y del Celtic de Glasgow, entre otros. Pero Jordan juega un poco m¨¢s lejos de la porter¨ªa, con m¨¢s libertad, ubic¨¢ndose m¨¢s como un segunda punta. Y sus gestos son m¨¢s elegantes, m¨¢s dotados de cierta sutilidad. No es un matador tan contundente y destaca por sus recursos t¨¦cnicos. A priori no partir¨¢ como titular con Suecia, pero puede ser un interesant¨ªsimo recurso en las segundas partes.
Alguna duda m¨¢s en defensa. En el Mundial de Rusia, la pareja de centrales Granqvist-Lindel?f funcion¨® a la perfecci¨®n. Pero Granqvist tiene ya 36 a?os y ha regresado a la liga local. Aunque est¨¢ en la convocatoria, ha perdido la plaza de titular en la fase de clasificaci¨®n en favor de Marcus Danielson, que tras destacar en el campeonato sueco fich¨® por el Dalian chino en 2020. Su primera llamada a la selecci¨®n fue con 30 a?os en 2019. Es alto y fuerte, por lo que responde al perfil que le gusta a Andersson, pero existen dudas razonables sobre el rendimiento que puede dar en una gran cita de m¨¢xima exigencia.