Emilio Butrague?o en su fuero interno no debe de dar cr¨¦dito. Protagonista de grandes derbis del pasado siglo, ante un Atl¨¦tico tambi¨¦n grande con Futre a la cabeza, asisti¨® como jugador a toda clase de encuentros ante el equipo rojiblanco, muchos de ellos con protagonismo arbitral: sobra decir hacia d¨®nde se inclinaba la balanza (¨¦l fue testigo directo de lo que le tocaron sufrir a Futre y Orejuela ante Buyo). Eran tiempos donde el Atl¨¦tico empezaba con toda la ilusi¨®n del mundo estos partidos y acababa llorando por sus desgracias en forma de lamentables decisiones arbitrales. Un derbi s¨ª y otro tambi¨¦n. El equipo colchonero raras veces pod¨ªa con el Real Madrid. Ahora las l¨¢grimas han cambiado de bando y no hay nada que le haga regodearse m¨¢s al aficionado rojiblanco que ver al eterno rival poniendo mil excusas por no poder ganar el derbi. Butrague?o, en sus declaraciones tras el partido, simboliza la vuelta a la tortilla que le ha dado Simeone en esta etapa al frente del equipo rojiblanco. Ahora al Madrid le cuesta un mundo ganarle al Atl¨¦tico, celebra con gran ¨¦xito un empate sobre la bocina y se escuda en el ¨¢rbitro. Algo muy de tiempos pasados, pero al rev¨¦s.
El Atl¨¦tico perdi¨® el derbi de la ida y nadie dijo nada. El Real Madrid fue superior y no hubo m¨¢s historia. Tras el 1-1 del Wanda Metropolitano desde Chamart¨ªn s¨®lo se habla del colegiado y de la acci¨®n de la mano de Felipe. Acci¨®n que, por ejemplo, Iturralde, ¨¢rbitro de Carrusel y AS, coment¨® que no era merecedora de penalti. Tampoco para muchos excolegiados. Ni para Hern¨¢ndez Hern¨¢ndez. El Madrid siempre ha sido ajeno a todo esto. Es penalti porque lo dice el propio Real Madrid. No hay discusi¨®n alguna. En estos a?os Simeone ha podido ganar m¨¢s o menos t¨ªtulos, pero ha invertido los papeles y ahora hasta los lloros caen del lado blanco. Por cierto, esto ha sido ¨²nicamente un partido de una Liga de 38 jornadas. ?C¨®mo compararlo con una final de Champions, la de Mil¨¢n, en la que Sergio Ramos fue el gran protagonista con un gol en fuera de juego y un penalti flagrante (ambas jugadas son f¨¢ciles de encontrar en internet)?. As¨ª que, si el Madrid quiere hablar de errores arbitrales, calladito est¨¢ m¨¢s guapo, porque si el Atl¨¦tico se pone a hablar puede empezar por la mano de Als¨²a y llegar hasta nuestros d¨ªas de agravios de los blancos... Como se dice en el mus, a llorar a los Paules.