?De qu¨¦ se queja Carlos Sainz?

Muy disgustado se ha mostrado Carlos Sainz al acabar la quinta etapa del Dakar. Motivos no le faltan, desde luego. Llegaba a esta edici¨®n 2021 plet¨®rico de forma, moral y mec¨¢nica, dispuesto a reverdecer los laureles del a?o anterior. Y resulta que, junto a su copiloto Lucas Cruz, se han encontrado una competici¨®n muy diferente a la que esperaban. Al igual que los dem¨¢s participantes, sin duda, solo que a ellos los cambios se les est¨¢n atragantando como uno de esos polvorones navide?os que van tirando a durillos y no tenemos ni agua para pasarlos¡­ Los organizadores de la gran carrera del desierto advirtieron de que buscar¨ªan recuperar el esp¨ªritu que la convirti¨® en leyenda, sobre todo despu¨¦s de que muchos pilotos se quejaran en 2020 de exceso de velocidad y escasez de aventura. Y para hacerlo han recurrido a lo que m¨¢s que una t¨¦cnica, es un arte: la navegaci¨®n.

Orientarse en medio de la nada jam¨¢s es sencillo, menos incluso cuando se vuela a 180 km/h y peor para un motorista al que se le acumula el trabajo de pilotar y mantener el rumbo. As¨ª que son muchos los que se est¨¢n extraviando en busca de la ruta buena y los puntos de control. Ha sido un ilustre como Sainz el que ha puesto el grito en el cielo y el asunto traer¨¢ cola. Se queja el madrile?o despu¨¦s de varios d¨ªas con dificultades, Lucas Cruz parece atascado con el nuevo sistema de orientaci¨®n, el libro de ruta digital y el recorrido poco antes de la salida. Se acabaron las ayudas externas, especialmente relevantes en los grandes equipos con medios casi infinitos y un ej¨¦rcito de especialistas trabajando para facilitar las cosas. A esto hay que a?adir que la gente de Castera ha apostado por puntos de control complejos, precisamente para intentar que se corra menos teniendo que mirar m¨¢s. Un dif¨ªcil equilibrio, es indiscutible. Como siempre en estos casos, a quien peor le va es quien m¨¢s protesta, pero los comentarios de un veterano como Sainz deben invitar al an¨¢lisis y la reflexi¨®n. Igual el asunto se les ha ido de las manos...