El Pucela nunca se rinde

Mismo escenario, mismo resultado y el gol del Sevilla, de penalti dudoso, para variar. Pero el Real Valladolid volvi¨® a dejar una buena imagen, en la segunda parte, en los segundos 45 minutos fue el ¨²nico equipo que busc¨® la porter¨ªa contraria y la encontr¨®. Vaya si la encontr¨®. Con un golazo de Carnero de los que estar¨¢n entre los elegidos como los tantos del a?o. Cuando el lateral se dispuso a pegar la volea, todos la pegamos con ¨¦l, pero el gallego lo hizo con sutileza, no la revent¨®, sino que la coloc¨® all¨ª donde era imposible que Bono llegara, donde se tejen las telara?as, para traerse un punto a Zorrilla que mantiene al equipo en la media de un punto por jornada: 14 en 14. No es ninguna maravilla, pero teniendo en cuenta el inicio de Liga...

Acab¨® el partido y todos pensamos lo mismo. Primero, alegr¨ªa por un punto merecido y segundo, las preguntas del mill¨®n: ?por qu¨¦ el equipo no juega como en la segunda parte desde el inicio? ?por qu¨¦ parece que necesita ir perdiendo para atacar al contrario? Y la respuesta no es f¨¢cil. Algunos dir¨¢n que el t¨¦cnico ancla a su equipo, que es una suerte de 'amarrategui', lo cierto es que estamos viendo como la mayor¨ªa de los equipos en la Liga se vuelven demasiado conservadores cuando se ven en ventaja o el resultado les vale. Lo vimos ante Osasuna, el equipo que iba abajo en el marcador, en cada tramo de partido, jugaba mejor y era m¨¢s ambicioso, y lo vimos ayer. Necesit¨® el Real Valladolid verse por debajo en el marcador, en el descanso, para mejorar sus prestaciones, pero no fue s¨®lo por sus m¨¦ritos, sino porque el Sevilla contemporiz¨®, como la mayor¨ªa de los equipos, y lo termin¨® pagando.

?Qu¨¦ mejor¨® en la segunda parte? El equipo se junt¨®, presion¨® unido, no se hizo tan largo, sino que trabaj¨® m¨¢s junto y en bloque medio para estar m¨¢s cerca de la porter¨ªa de Bono. La consecuencia fue que esa falsa diferencia de intensidad que se percib¨ªa en la primera parte se dio la vuelta en la segunda. Al estar juntos y m¨¢s arriba, los duelos se igualaron, los pucelanos robaban m¨¢s arriba y asustaban a un Sevilla que parec¨ªa pensar que ya lo ten¨ªa todo hecho. La tuvo en un taconazo delicioso Marcos Andr¨¦ y acert¨® con una volea m¨¢gica Carnero. Y es que no se puede decir que este Real Valladolid se rinda f¨¢cil. No logra hacerse fuerte en lo que era bueno, ya que volvi¨® a encajar, pero, al menos, pelea, no se resigna y lucha por darle la vuelta a la situaci¨®n. Un equipo que no se rinde es un equipo con alma y que puede salir adelante.