No es pa¨ªs para viejos
A partir de los 30 a?os, cualquier jugador empieza a estar bajo sospecha. Hay una obsesi¨®n extendida por jubilar a los futbolistas antes de tiempo. Parecemos t¨¦cnicos de ascensores: en cuanto vemos un partido flojo o una carrera a destiempo, les colgamos el cartel de ¡®no apto¡¯. Y a otra cosa. Son los d¨ªas de la obsolescencia programada, en los que da igual el rendimiento. No hay paciencia. Ni coherencia. Sergio Busquets lleva jugando desde los 18 a?os como si tuviera 32 y ahora que tiene 32 se le pide que corra como si tuviera 18.
La realidad es que seguimos juzgando a los jugadores igual que hace veinte a?os, sin tener en cuenta los adelantos m¨¦dicos, la profesionalizaci¨®n de los clubes y el f¨²tbol menos violento que se practica. Es cierto que no existen los milagros y que lo que la naturaleza no da, Salamanca no lo presta. Pero creo que hay un excesivo recelo hacia la edad.
Ibrahimovic est¨¢ a un nivel excepcional a los 39 a?os. Qu¨¦ decir de Sergio Ramos. Modric es determinante saliendo desde el banquillo a los 35 a?os. Jes¨²s Navas va a cumplir otros tantos como uno de los laterales m¨¢s en forma de Europa. Joaqu¨ªn ofrece minutos resolutivos. Fernando Reges da un cl¨ªnic en cada partido. Echo de menos a Pepe cada vez que veo a Militao sobre el campo. Y hay mil ejemplos m¨¢s. Y todos tienen en com¨²n el sambenito de la edad. Aunque sea desde la admiraci¨®n, resulta molesto estar escuchando continuamente que ya les queda poco.
Cuando eres bueno, eres bueno. La edad importa menos. Ya sabemos que Ansu Fati es muy joven, no hace falta recordar a cada bal¨®n que toca los a?os, meses y d¨ªas que cumple. Algo parecido me ocurr¨ªa con Doncic. Lo considero hasta una falta de respeto. Tampoco hace falta mencionar cada r¨¦cord que rompe Felipe Reyes. O Federer. O Cristiano. O Serena. O Alejandro Valverde. No hay mayor muestra de admiraci¨®n que tratarlos como a uno m¨¢s, no como a inminentes exdeportistas. Porque para eso luchan cada d¨ªa. Para competir de t¨² a t¨². Ya habr¨¢ tiempo de homenajes, estad¨ªsticas y laureles.
Uno de mis entrenadores favoritos, Boza Maljkovic, quiso fichar al p¨ªvot Dino Radja para el Real Madrid con 38 a?os, ya retirado. Fue a por ¨¦l como iban a por Clint Eastwood en ¡®Sin Perd¨®n¡¯. Cuando le recriminaron su edad, Boza dej¨® una frase inolvidable: ¡°Pagamos a todo tipo de jugadores un mill¨®n de euros por cabeza y damos dos millones a chavales que no saben ni sonarse la nariz, mientras que los verdaderos cracks se despiden antes de tiempo¡±.
Un respeto a los que saben sonarse la nariz.