La agon¨ªa diaria del Giro
Jo?o Almeida ara?¨® seis segundos de bonificaci¨®n en la meta de Monselice. Nadie guarda nada en el Giro de Italia por si este fin de semana es el ¨²ltimo. As¨ª lo piensan la mayor¨ªa de los corredores, entre ellos Pello Bilbao, que marcha tercero, a 49 segundos de la maglia rosa. El ambiente est¨¢ enrarecido y la posibilidad de suspensi¨®n es m¨¢s que un runr¨²n. Incluso lo ha pedido oficialmente el Education First, que propone fechar el final de la carrera este domingo, porque la burbuja se ha desborbado. Ni la UCI, ni por supuesto RCS Sport, han aceptado la petici¨®n. La idea es llegar a Mil¨¢n el d¨ªa 25, como marca el programa, pero los antecedentes frenan el optimismo. Hay dos equipos, el Mitchelton y el Jumbo, y tres relevantes ciclistas, Simon Yates, Steven Kruijswijk y Michael Matthews, que ya han abandonado la caravana. La incertidumbre viene provocada porque, a diferencia del Tour de Francia, aqu¨ª el virus s¨ª ha penetrado en el pelot¨®n. Los positivos de 17 polic¨ªas en el Giro-E, una carrera de bicicletas el¨¦ctricas que se corre paralelamente en la ruta, pero coincide en hoteles, ha acrecentado la sensaci¨®n de inseguridad.
Thomas de Gendt, uno de los ciclistas m¨¢s carism¨¢ticos, ha criticado con dureza al Giro, ha reconocido que entre los corredores se ha hablado de parar la competici¨®n y hasta ha deslizado que se est¨¢n tapando datos, a lo que Mauro Vegni, el organizador, ha respondido pidiendo prudencia. Los nervios afloran. Y el miedo es libre. La situaci¨®n proviene del crecimiento de contagios en esta segunda ola, que en las ¨²ltimas fechas est¨¢ golpeando con fuerza a Italia. Y eso, inevitablemente, tambi¨¦n tiene una notable repercusi¨®n en el deporte y en un evento ambulante como el Giro. Este fin de semana se disputan una contrarreloj de 34 kil¨®metros y una jornada de monta?a con llegada en alto en Piancavallo. Nadie se va a guardar nada. Por si acaso no hay m¨¢s. Y en esa lucha estar¨¢ Pello Bilbao.