Un amago de mot¨ªn de 30 minutos

Dos horas al l¨ªmite. Se ha hablado poco de lo que ocurri¨® entre las siete y las nueve de la noche del 20 de julio en la Liga SmartBank. La velocidad de los acontecimientos desde que se conoci¨® que no pod¨ªa jugarse el partido Deportivo-Fuenlabrada y la decisi¨®n de seguir en marcha con la jornada pasase lo que pasase, taparon serios movimientos que dar¨ªan para un buen montaje televisivo. Sobre las 19:05 horas, los directivos de los equipos afectados, muchos de ellos subidos en el autob¨²s con sus futbolistas, recibieron noticias de lo que estaba sucediendo en A Coru?a. Lo hicieron gracias a la informaci¨®n que public¨® As, no a ninguna comunicaci¨®n de LaLiga. Mientras que los jugadores no ten¨ªan ni idea de lo que pasaba, los directivos de los clubes implicados se mandaban mensajes incr¨¦dulos con el escenario ante el que se encontraban.

Paso atr¨¢s. Cuando al fin pudieron bajarse de los autobuses para hablar sin el conocimiento de los jugadores, cuya concentraci¨®n no se quer¨ªa alterar, se estableci¨® una red de contactos entre clubes como Lugo, Numancia, Albacete o Elche, que tuvieron claro durante unos minutos que la jornada no se pod¨ªa jugar. Fuenlabrada o Deportivo pod¨ªan beneficiarse en un futuro inmediato. Jugar con la ventaja de saber qu¨¦ resultado necesitaban o, peor incluso, hacerlo contra un rival desmotivado al que ya no le iba nada. Eso era una manera de adulterar la competici¨®n. Sin embargo, el arrojo de los clubes se apag¨® en minutos, cuando la RFEF amenaz¨® con dar el partido por perdido a todos los clubes que no se presentaran. El Numancia se baj¨® del barco y el mot¨ªn se apag¨® en apenas media hora.

Detectives privados. Es el del Fuenlabrada uno de los casos de la temporada, lleno de intrigas y hasta de detectives privados que quisieron rastrear huellas en los d¨ªas anteriores. El presidente del Fuenlabrada, Jonathan Praena, reuni¨® a sus jugadores y les pregunt¨® si eran ciertos los rumores que corr¨ªan sobre una cena com¨²n de la plantilla en Madrid. Necesitaba protegerlos. Los jugadores lo negaron. Hab¨ªan cumplido el protocolo, por m¨¢s que el COVID hab¨ªa entrado en el vestuario.

Irregularidades. Nada ha sido perfecto. Tampoco en el playoff de ascenso a Segunda Divisi¨®n B. Los test financiados prometidos por la RFEF llegaron. Los resultados, sin embargo, nunca fueron comunicados... Curiosamente, hasta ayer. Al abrigo del caso Fuenlabrada se han suspendido el Lealtad-Alcoyano y el Marino-Linares.