Las malas noticias rompen la rutina
Italia supera las muertes contabilizadas en China por el coronavirus. Entramos de nuevo en un estado de preocupaci¨®n constante.
Despu¨¦s de 15 d¨ªas encerrados en casa, vamos construyendo nuestra nueva rutina diaria. Suena el despertador, preparamos el desayuno, dejamos a los ni?os delante de sus pantallas preparados para la primera conexi¨®n con sus profesores, limpiamos y recogemos la casa, preparamos la comida, entrenamos.
Todo estaba empezando a fluir, cada miembro de la familia hab¨ªa encontrado su espacio y sus tareas. La vida encerrados entre cuatro paredes estaba empezando a transcurrir con normalidad y a tener sentido, nos sent¨ªamos m¨¢s optimistas. Cada d¨ªa a las 21:00, mis vecinos sacan un altavoz a una de sus terrazas y ponen tres canciones que el resto del vecindario cantamos y aplaudimos. Cuando acaba el espect¨¢culo, nos damos las buenas noches entre alguna que otra broma. Empez¨¢bamos a acostumbrarnos al confinamiento.
Y hablo en pasado porque nuestro estado de ¨¢nimo cambi¨® hace un par de d¨ªas. La realidad llam¨® a nuestra puerta y al abrir nos dio una bofetada que nos dejo KO. Italia hab¨ªa superado en n¨²mero de fallecidos a China. ?C¨®mo puede ser posible? ?A d¨®nde vamos a llegar? Fue entonces cuando las canciones de los vecinos empezaron a ser m¨¢s tristes, nuestra casa m¨¢s silenciosa y los memes que nos mandaban por whatsapp dejaron de tener gracia. Entramos de nuevo en un estado de preocupaci¨®n constante, una angustia que nos lleva a ver las noticias constantemente con la esperanza de encontrar alg¨²n dato positivo. Y nos repetimos a cada momento ese famoso "todo ir¨¢ bien".