Sin f¨²tbol pero con vida
Cuando estuve en Chile hace unos meses, me di cuenta de que la situaci¨®n era grav¨ªsima cuando me explicaron que el campeonato de f¨²tbol hab¨ªa sido suspendido a falta de seis jornadas. El pueblo chileno, en su lucha por los derechos fundamentales, sufri¨® violaciones y asesinatos, pero el indicador m¨¢s claro de que Chile estaba ardiendo fue la cancelaci¨®n de la Liga. Curiosamente, el Gobierno era quien menos deseaba el cierre de la temporada: con el f¨²tbol, la gente se enfrentaba entre s¨ª y no con los temibles carabineros, y los disturbios se quedaban en los estadios en vez de salir a la calle. En Espa?a, desde la Guerra Civil, es la primera vez que LaLiga se detiene por fuerza mayor.
Sin Liga, mucha gente siente algo parecido al vac¨ªo porque nuestro tiempo ha sido ocupado completamente y no sabemos qu¨¦ hacer sin estar entretenidos. El f¨²tbol ordena nuestro calendario y nos garantiza un flujo constante de esperanzas semanales: la Champions, el play off, el ascenso, la permanencia...
Adem¨¢s, en un pa¨ªs tan sociable como el nuestro, el f¨²tbol es la excusa perfecta para estar ¡°junto¡± a otros, que no es lo mismo que estar ¡°con¡± otros. Durante 90 minutos, la gente que te rodea en la grada o en el bar se convierte en sangre de tu sangre. Nos gusta estar en medio de una familia temporal para sentir el calor del reba?o. El f¨²tbol como excusa perfecta para quejarnos sin hacer nada, para protestar sin actuar y para poner un problema para cada soluci¨®n. Guerreros de barra.
El f¨²tbol tambi¨¦n canaliza nuestra tendencia cainita y evita que nos matemos porque, vestidos con camisetas de equipos distintos, libramos simb¨®licamente una guerra civil. Algo que es ideal para un pa¨ªs que presume m¨¢s de sus odios que de sus amores. Pero, sobre todo, el f¨²tbol nos ofrece un motivo de conversaci¨®n sin necesidad de saber de lo que hablamos.
En estos d¨ªas sin Liga, aprovechemos en casa para escuchar nuestro partido interior. Puede que vayamos perdiendo sin saberlo y a¨²n estamos a tiempo de remontar.