Rom¨¢nticos
El pasado domingo en el minuto 1 del Bar?a-Granada, como cul¨¦ que soy, sonre¨ª feliz como quien se encuentra con una ex muy querida a la que jam¨¢s olvid¨® a pesar de haber tenido otras novias en los ¨²ltimos a?os. Esa ex de la que os hablo es el f¨²tbol de posesi¨®n con presi¨®n adelantada, nuestra se?a de identidad en las mejores ¨¦pocas de Guardiola y Rijkaard, herencia, por supuesto, del dios Cruyff. S¨¦ que muchos pensar¨¦is que soy demasiado optimista. Soy consciente de que el partido no fue f¨¢cil y de que falta mucho, pero la actitud promet¨ªa y promete. Teniendo en cuenta que Seti¨¦n lleva tres d¨ªas dirigiendo el equipo y que venimos de una ¨¦poca en que el juego era plano y el equipo se fracturaba y que cualquier rival nos met¨ªa f¨¢cilmente dos goles y nos discut¨ªa la posesi¨®n, es una gran noticia. En el c¨®digo deontol¨®gico del Bar?a aparece un postulado ineludible: jam¨¢s se puede ser un equipo m¨¢s. Estar¨¢n de acuerdo conmigo en que lo que ve¨ªamos ¨²ltimamente era un f¨²tbol triste y funcionarial (salvo Messi y alguna excepci¨®n m¨¢s).

Si algo nos gusta del Bar?a a los que nos gusta el f¨²tbol es que no apuesta por un juego del mont¨®n. Vernos convertidos en un equipo prescindible era doloroso. S¨¦ que resulta extra?o relevar a Valverde teniendo l¨ªder al equipo, pero es que el Bar?a exige m¨¢s que eso. Hace 20 a?os a Robson se le pit¨® por no jugar bien a pesar de ganar 6-0 al Rayo. No basta con ganar, se ha de hacer con estilo. En un mundo en que los ganancias priman por encima de la calidad, en que nos dan gato por liebre en la pol¨ªtica, los anuncios, la prensa y en la calle, que un equipo tenga esta filosof¨ªa es un alivio, un oasis en medio de la locura resultadista. Tenemos un fin, s¨ª, pero no valen todos los medios. ?No es una gran noticia? Generalmente el Bar?a ha ganado m¨¢s cuando ha jugado mejor. Se quiere ganar jugando a ser el Bar?a, no a lo que hacen otros equipos, jugando con sello, so?ando. Hay una identidad y es irrenunciable. Qu¨¦ le vamos a hacer, somos unos rom¨¢nticos.