Vinicius y el espejo de Benzema
Irse en el minuto 80. Hay normas en el nuevo f¨²tbol que van contra natura, como la de que los porteros tengan que tener un pie en la l¨ªnea en los lanzamientos de penalti. Eso va incluso contra el movimiento natural de los guardametas. Luego hay normas en los clubes que tampoco tienen mucho sentido. Permitir que los jugadores se marchen a partir del minuto 80, como hizo Bale contra el Legan¨¦s, supongo que para evitar el atasco de salida del Bernab¨¦u, va contra el esp¨ªritu del equipo. Se supone que disfrutar o sufrir juntos las victorias y las derrotas deber¨ªa ser lo m¨ªnimo en cualquier grupo. El problema ya no es que Bale vaya por libre y que haya que convivir con su inadaptaci¨®n, acept¨¢ndole como es, para buscar alg¨²n buen tramo de rendimiento entre lesi¨®n y lesi¨®n. Bastante peor resulta que Vinicius haga lo mismo. Un chico de su edad tiene que tener otros referentes y comprender que en el vestuario del Madrid parec¨ªan sagrados unos c¨®digos diferentes hasta que los documentales de Amazon Prime se hicieron m¨¢s importantes que la unidad del grupo.
El mal del consentido. Fui de los cr¨ªticos con Benzema en su primera etapa, no por su descomunal talento, pero su por su discutible compromiso. La pegatina de consentido de la zona noble le acompa?aba entonces y le perjudicaba. Sus goles se festejaban de distinta manera que los de sus compa?eros en el palco y la sangr¨ªa con Higua¨ªn, fomentada desde arriba, se antojaba injusta. No pueden doler prendas en reconocer que el Benzema post-Cristiano y postl¨ªos judiciales en Francia es el mejor futbolista de este Real Madrid de largo. Le ha sentado fant¨¢sticamente la madurez. Le gusta ayudar a los que llegan. Se implica con ellos y eso habla bien de ¨¦l hasta como persona. Es el espejo en el que deb¨ªa mirarse Vinicius, otro gran consentido de partida, que tiene mucho m¨¢s que dar que lo que estamos viendo. A¨²n siendo futbolistas radicalmente distintos en su manera de interpretar el juego, s¨ª le puede valer a Vini la lecci¨®n de que esa etiqueta la carga a pesar suyo. La pausa tambi¨¦n se puede trabajar, pero desde la tranquilidad.
El arroz de Isco. Como sigue siendo una debilidad, el malague?o debe entender que es ahora o fuera del Madrid. Teniendo un genio dentro es una pena que prevalezca el mal genio. Ya no hay t¨¦rmino medio. Aunque Lopetegui ya no est¨¦ en el banquillo, puede ser el jugador importante, desequilibrante y con ese duende que hoy parece enterrado. Debe creerse importante, m¨¢s all¨¢ de lo que piense su entrenador.