Benzema, James, Hazard... y el VAR
Fue un partido de los que dejan cosas. En primer lugar, de nuevo Benzema. Excelente el curso pasado, en ¨¦ste parece todav¨ªa un poco mejor. ?l abri¨® el partido con los dos primeros goles y sacudi¨® el palo con otro gran disparo. Una garant¨ªa. Despu¨¦s, James, el ni?o perdido y hallado en el templo. Gust¨® mucho en el Bernab¨¦u en su primer curso, luego se perdi¨® por razones que ¨¦l conocer¨¢ y ahora vuelve, un poco de rebote, y encandil¨®. Exquisito en el juego, inagotable en el quite y en el trabajo. El jugador que enciende la luz cuando el equipo se acerca al ¨¢rea y hacen falta maniobras imprevisibles para acelerar la jugada.
Con ellos y el esfuerzo com¨²n el Madrid lleg¨® 3-0 al descanso. Todo parec¨ªa resuelto, as¨ª que era el momento ideal para mostrar por fin a Hazard, el fichaje del a?o. Entusiasm¨® en sus primeras arrancadas, en una de las cuales le neg¨® el gol Aitor, con una de sus varias buenas paradas de la ma?ana. Cerca de ¨¦l, Vinicius alete¨® con ilusi¨®n, mostr¨¢ndose m¨¢s seguro que en la primera mitad, en la que pareci¨® arrastrar una falta de confianza en s¨ª mismo que s¨®lo se le corrigi¨® cuando de un pase suyo lleg¨®, al borde del descanso, el gol de Casemiro. Este Madrid no tiene a Cristiano, pero tiene muy buenos y variados jugadores de ataque.
La felicidad la averiaron dos cosas: la mand¨ªbula de cristal y el VAR. En la segunda mitad el Levante se atrevi¨® (y m¨¢s desde la marcha conjunta de Casemiro y Sergio Ramos), marc¨® dos goles y roz¨® el tercero, que hubiera dejado un humor de mil diablos en la parroquia. Desde el 11 de abril el Madrid no deja su porter¨ªa a cero. Por ah¨ª se van muchos puntos y eliminatorias. ?Y el VAR? Fue el patoso en la fiesta de un buen partido, cargado de goles. Dos intervenciones in¨²tiles y largu¨ªsimas nos mostraron la cara tonta de este invento. El nuevo sistema, impuesto por Rubiales en uno de sus arrebatos, es hoy por hoy mucho m¨¢s lento. Y si encima entra para nada, pues peor.