El Espanyol en la Liga de verano
Las ligas de f¨²tbol de verano en los pueblos son adictivas. Las hay en formato semanal, resueltas en 24 horas de marat¨®n, algunas tienen fases de grupos y otras son a partidos a ¡®vida o muerte¡¯ desde el pitido inaugural. Lo mismo te pagan las fiestas del pueblo si las ganas que te destrozan el verano a base de ampollas y agujetas por la falta de costumbre balomp¨¦dica. No hay verano sin su liga.
Y en pleno verano empieza LaLiga, la de los buenos, y como cada a?o, lo hace sin que el mercado de fichajes haya cerrado. No encontrar¨¢n en estas l¨ªneas una cr¨ªtica al asunto. El f¨²tbol siempre fue as¨ª. Dejarlo todo para ¨²ltima hora hace al f¨²tbol m¨¢s humano.
Lo que viene ahora es una ¡¯mini liga¡¯ de verano. Sensaci¨®n favorecida por el par¨®n cuando se disputen las tres primeras jornadas en agosto y por el tard¨ªo cierre de mercado.
El Espanyol llega a esta ¡®mini liga¡¯ con los deberes casi hechos pero muy bien encaminados. Inicia el paso tranquilo. Tiene la Europa League en el bolsillo y las salidas ni fueron todas las temidas ni las que fueron generaron traumas al ser bien reemplazadas.
El equipo arranca ahora con un ¡®monito¡¯ con mucho talento y sonrisa de canchero. Para la zaga se fich¨® como remplazo a Calero, que tambi¨¦n pinta hermoso. Se ha mantenido el bloque reforzando el fondo de armario y con el cambio de jefe y de idea, la confianza se ha visto afianzada.