?Cu¨¢l es el techo de Ale Gal¨¢n?
El madrile?o suma ya 5 t¨ªtulos World Padel Tour -es el jugador m¨¢s joven en lograrlo- y est¨¢ llamado a dominar la pr¨®xima d¨¦cada.

No es nuevo, ni mucho menos, pero no por ello deja de sorprender. Ale Gal¨¢n ha logrado sumar el tercer t¨ªtulo de la temporada 2019 en el Mijas Open tras cuajar un torneo perfecto tanto en el plano personal como junto a su compa?ero Pablo Lima.
Y es que Gal¨¢n suma ya cinco t¨ªtulos en la ¨¦lite deportiva a sus tempranos 23 a?os de edad. Una cifra que refrenda su papel dentro del veinte por diez y le sit¨²a en el primer escalaf¨®n entre los jugadores m¨¢s j¨®venes en alcanzar dicha cifra en la era World Padel Tour por delante del argentino Franco Stupaczuk ¨Cque suma seis, pero con dos Challengers- y el gaditano Juan Lebr¨®n que suma cuatro.
Un Ale que ha crecido, y mucho, desde que irrumpiera all¨¢ por 2016 junto a Juan Cruz Belluati en la ¨¦lite del p¨¢del moderno. Un jugador evolucionado, pero reconocible, que mantiene caracter¨ªsticas muy marcadas de su juego. Eso, precisamente, es lo que ha refrendado en Mijas.
Porque el torneo de Gal¨¢n en la Costa del Sol ha sido, simplemente, para enmarcar. Apoyado y arropado por un superlativo Pablo Lima que no ha dudado en adoptar el papel de l¨ªder silencioso de la pareja ¨Cparece haber tenido buen maestro- el madrile?o ha recuperado la mejor de sus versiones, esa que parec¨ªa haberse diluido a principios de a?o.
Un inicio de este World Padel Tour 2019 que no fue f¨¢cil. El curso pasado fue el de su consagraci¨®n como estrella del deporte de la pala tras haber sumado dos t¨ªtulos junto al sempiterno Mat¨ªas D¨ªaz y quiz¨¢ la presi¨®n, las expectativas, el cambio de pareja o una mezcla de todas ellas hicieron que su rendimiento no fuera el esperado. Se le ve¨ªa lejos de su nivel y, a tramos, deseorientado.
Y, ahora, apenas unos meses despu¨¦s brilla. Y con mucha intensidad. Gal¨¢n supo superar junto a Mieres el bache inicial y hubo un punto de eclosi¨®n en las semifinales del Buenos Aires Master -torneo que lograr¨ªan a la postre- ante los n¨²meros uno Sanyo y Maxi. Despu¨¦s, y tras hacer final en Valladolid, su ruptura para comenzar un proyecto junto a Pablo Lima no solo no parece haberle lastrado, sino que ha potenciado su juego.
Porque Gal¨¢n tiene todo lo necesario para ser un jugador de rev¨¦s de ¨¦poca y eso, en el p¨¢del de hoy en d¨ªa, es mucho decir. Tiene la edad, el talento y, aunque parezca incre¨ªble, la experiencia. Sin duda est¨¢ entre esos pocos elegidos que dominar¨¢n el p¨¢del la pr¨®xima d¨¦cada junto a los Lebr¨®n, Tapia, Stupaczuk, Tello, Chingotto o Garrido.
Un Gal¨¢n que gusta, y mucho, a la afici¨®n y se gusta en pista. Su juego dominador, ¨¢gil, potente y t¨¦cnico tiene tendencia a jugar pegado a la red para tapar espacios, ocupar el centro de la pista y potenciar la volea ¨Ccomo lo hac¨ªa Juan Mart¨ªn D¨ªaz, uno de sus referentes- y el poderoso remate que domina.
Quiz¨¢, una de sus mayores virtudes sea, a su vez, uno de sus todav¨ªa defectos por pulir. Gal¨¢n es un jugador de intensidad infinita. Necesita estar metido, muy metido, en los partidos para sacar lo mejor de s¨ª mismo y es precisamente esa intensidad, esa tendencia a buscar el contacto constante con la pelota y hacerlo con una alta velocidad lo que le hace jugar por encima de las revoluciones convenientes ofreciendo al rival espacios donde definir.
Una carencia, la pausa, que se ir¨¢ corrigiendo con el tiempo, la experiencia, las derrotas, las victorias y el devenir de su carrera como ya le ocurriera al mayor referente del p¨¢del nacional y una de las estrellas World Padel Tour, Paquito Navarro.
Con todo, Gal¨¢n se ha situado ya entre los seis mejores jugadores del circuito solo por detr¨¢s de Sanyo Guti¨¦rrez, Maxi S¨¢nchez, Paquito Navarro, Juan Lebr¨®n y Pablo Lima. Una posici¨®n a la que suma ser componente de la tercera pareja del ranking junto a Lima habiendo sumado dos de dos triunfos posibles en Valencia y Mijas.
Y, por todo ello, lo ¨²nico que el seguidor del circuito profesional de p¨¢del se pregunta es: ?cu¨¢l es el techo de Ale Gal¨¢n?