Carapaz: un campe¨®n de altura

Hasta hace poco, si me preguntaban por deportistas de Ecuador, me ven¨ªan dos nombres a la cabeza: el extenista Andr¨¦s G¨®mez, ganador en Roland Garros 1990, y el exatleta Jefferson P¨¦rez, oro ol¨ªmpico y triple campe¨®n mundial. A G¨®mez le recordamos los ochenteros porque rivalizaba, y tambi¨¦n hac¨ªa pareja en dobles, con Emilio S¨¢nchez Vicario, al que segu¨ªamos por el circuito antes de que Bruguera reabriera las puertas de Par¨ªs para que entraran por ellas Moy¨¢, Ferrero, Albert Costa y un torbellino llamado Nadal. A Jefferson tambi¨¦n le tuvimos muy presente, ya en los 90, porque a Espa?a le va mucho la marcha y era el rival a batir, al que pocas veces se bat¨ªa. Hace un a?o emergi¨® Richard Carapaz, vencedor de una etapa y cuarto de la general en Italia. Y al t¨¦rmino del Giro 2019 ha entrado para siempre en el santoral.

A sus 26 a?os reci¨¦n cumplidos, Carapaz ya es un ilustre del deporte de Ecuador y del pelot¨®n mundial, donde todav¨ªa le queda un largo recorrido. Su s¨®lida conquista de la maglia rosa le augura m¨¢s ¨¦xitos, y su espectacular forma de entender la bicicleta le proyecta mucho seguimiento. El ciclismo no era uno de los deportes principales de su pa¨ªs, en contraste con su vecina Colombia, pero su victoria en el Giro sembrar¨¢ una afici¨®n de la que no se tardar¨¢ en recoger frutos. No hay nada mejor que un referente para que un deporte crezca en cualquier patria, grande o chica. En ese caso, adem¨¢s, el biotipo es perfecto para el ciclismo, para escalar las grandes monta?as y para recuperarse de los esfuerzos gracias a su adaptaci¨®n natural a la altitud. Carapaz se ha criado en Carchi, a casi 3.000 metros. Y eso da alas a los ciclistas.