La Rioja eBike Ride, una experiencia m¨¢s que recomendable

Cuando sus promotores me propusieron participar en la primera edici¨®n de La Rioja eBike Ride no lo dud¨¦ ni un instante. La oportunidad se antojaba ¨²nica: aprovechar de la organizaci¨®n de una competici¨®n de categor¨ªa internacional como La Rioja Bike Race para disfrutar de dos jornadas de pedaleo por una regi¨®n rebosante de atractivos para la pr¨¢ctica del ciclismo de monta?a.

En su momento en este mismo espacio ya os adelant¨¦ la propuesta de los organizadores de Octagon, que se presentaba muy tentadora. Y lo cierto es que las expectativas se han visto satisfechas plenamente. A la llegada al polideportivo de Logro?o, base de todo el evento incluida la carrera UCI de cuatro jornadas, los inscritos en el evento para e-bikes recib¨ªan su dorsal y una serie de peque?os obsequios facilitados por los patrocinadores. Pero sobre todo el escenario resultaba impresionante, un montaje de primer nivel y el ambiente propio de una carrera con cerca de 800 participantes, entre ellos muchos ciclistas de ¨¦lite.

Las pedelec permanec¨ªan en esta instalaci¨®n, en una zona cubierta y cerrada, vigilada por una empresa de seguridad y con puntos de recarga para las bater¨ªas. All¨ª aguardar¨ªan hasta la ma?ana siguiente, cuando se pondr¨ªa en marcha el primero de los dos recorridos de esta edici¨®n inaugural de La Rioja eBike Ride, que arranc¨® a las 11 de la ma?ana del viernes con unos 50 kil¨®metros por delante.

Tras una corta explicaci¨®n de los organizadores, el grupo se puso en marcha con un gu¨ªa abri¨¦ndolo y otro cerr¨¢ndolo para que nadie se quedara descolgado, adem¨¢s de contar con un mec¨¢nico tambi¨¦n sobre una e-bike por si fuera necesario realizar alguna reparaci¨®n en ruta y un servicio de avituallamiento al inicio, mitad y finalizaci¨®n de la etapa. As¨ª que los participantes s¨®lo deb¨ªamos preocuparnos de dar pedales y saborear un d¨ªa que, por si fuera poco, amaneci¨® en unas condiciones perfectas para la pr¨¢ctica deportiva.

Sin duda una de las sorpresas m¨¢s agradables fue encontrarnos con nada menos que Jos¨¦ Antonio Hermida, embajador de la organizaci¨®n en este encuentro electrificado. Un lujazo rodar junto a un campe¨®n mundial y medallista ol¨ªmpico, que tras su retirada del deporte de alto nivel se ha convertido en un apasionado del ciclismo con asistencia el¨¦ctrica, perfecto conocedor de su realidad (sobre todo de los productos de Merida, la marca de sus ¨¦xitos y con la que sigue colaborando) y, muy especialmente, un tipo estupendo: cercano, amable y dispuesto en todo momento a echar una mano a quien lo pudiera necesitar. Lo dicho, un privilegio¡­

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En mi caso su presencia result¨® doblemente valiosa, ya que me pudo explicar todos los detalles y secretos de la Merida E One Twenty 800 que utilice para la ocasi¨®n. La marca me la facilit¨® para una prueba y os contar¨¦ mis impresiones a su manillar en otro post, aunque de momento os puedo adelantar que la bici se comport¨® de maravilla y me dej¨® unas sensaciones m¨¢s que positivas.

El recorrido marcado por componentes del club ciclista de Carlos Coloma se revel¨® espectacular. Caminos y senderos por lugares de enorme belleza de esta zona de La Rioja, de dificultad media y con posibilidad de incorporar algunas complicaciones m¨¢s para quienes as¨ª lo desearan. El trazado permit¨ªa en algunos puntos dividir el grupo y afrontar obst¨¢culos de mayor entidad si se prefer¨ªa, reagrup¨¢ndose el pelot¨®n unos kil¨®metros m¨¢s adelante. Risas, diversi¨®n y parajes majestuosos aderezaban lo que se concret¨® en un d¨ªa magn¨ªfico de e-bike. Al acabar, los servicios disponibles se completaban con la disponibilidad de vestuarios, duchas, aseos, lavado de bicicletas e incluso masajistas (estos ¨²ltimos s¨®lo en el caso de los inscritos a las dos jornadas).

El esquema se repiti¨® en la segunda jornada del s¨¢bado, aunque en este caso con un recorrido m¨¢s rodador, buena parte por tramos del Camino de Santiago, pero tambi¨¦n de mayor longitud, super¨¢ndose los 50 kil¨®metros. El entorno predominante fueron los vi?edos que dan fama mundial a la regi¨®n, para acabar en Santo Domingo de la Calzada despu¨¦s de comprobar que las bicicletas el¨¦ctricas son ideales para una actividad de este tipo, en la que se combina deporte con turismo, cultura y gastronom¨ªa. De nuevo la organizaci¨®n se revel¨® impecable y todos los participantes, unos cuarenta, se mostraron satisfechos con la experiencia.

En resumen, el enfoque de La Rioja eBike Ride me parece, con toda sinceridad, altamente recomendable. Conviene recordar que no se trata de una competici¨®n,?su filosof¨ªa es mucho m¨¢s l¨²dica y dirigida a un perfil de ciclista bien definido. Quien busque sensaciones m¨¢s fuertes, poner a prueba su fortaleza f¨ªsica o medirse con otros aficionados encontrar¨¢ con seguridad iniciativas m¨¢s apropiadas para tales exigencias. Sin embargo, si lo que te apetece es disfrutar de tu bicicleta el¨¦ctrica en un ambiente relajado y controlado, con las ventajas de una organizaci¨®n profesional y por un precio asumible dir¨ªa que es algo que deber¨ªas probar.

Octagon tiene la intenci¨®n de afianzar los eventos para e-bikes dentro de su calendario de competiciones o en otros del mismo estilo. Las siguientes citas para este a?o son el festival Bicispace, en Siero (Asturias) el pr¨®ximo 8 de junio, y la Catalu?a Bike Race, en La Molina (Gerona) a finales del mes de septiembre. Si mi experiencia personal os ha animado de alg¨²n modo, estad atentos a sus p¨¢ginas web para formalizar la inscripci¨®n. Creo que, como yo, lo vais a pasar en grande con la experiencia.

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