A Benzema s¨®lo le faltar¨ªa jugar con Griezmann y Mbapp¨¦
Cerr¨® el debate. En la mediocre temporada del Real Madrid s¨®lo ha emergido la figura de Karim Benzema, no desde el talento que ya se le supon¨ªa, sino desde el liderazgo y desde la ambici¨®n. El equilibrio personal ha acompa?ado su excelente momento realizador. Puede que no haya marcado igual en los partidos importantes, pero es el ¨²nico que ha mejorado con la salida de Cristiano, con Lopetegui, con Solari y, por supuesto, con Zidane. Su treintena de goles as¨ª lo atestigua. Si su continuidad se cuestionaba a principios de temporada, la unanimidad para que se quede parece total. Benzema, tantas veces consentido, se ha ganado esa confianza.
El pulgar de Deschamps. Su buena temporada a nivel personal no le va a servir para obtener el perd¨®n de Deschamps, ni siquiera con la cruz a cuestas de haberse perdido el Mundial que gan¨® su selecci¨®n. Esa espina la llevar¨¢ toda su carrera. Es tan evidente que su regreso se antoja imposible, que en Francia ni siquiera se plantea el debate. No hay ning¨²n tridente en el planeta f¨²tbol que pueda sonar mejor en estos momentos que Benzema, Griezmann y Mbapp¨¦. La distancia futbol¨ªstica entre Karim y Giroud es sideral, pero el seleccionador franc¨¦s baj¨® su pulgar y nadie cree ya en su regreso. Una pena.
La necesidad de otro nueve. Una cosa no quita la otra. Benzema debe seguir, pero el Madrid no puede volver a repartir la responsabilidad del gol entre varios. Hace falta traer a quien lo asegure, al menos en su hoja de servicios. Lewandowski, a pesar de su edad, o Jovic suenan a garant¨ªa pero, como Hazard, el polaco siempre estuvo loco por la m¨²sica.
Jugadores para hacer caja. Cuando Zidane solt¨® la famosa frase en rueda de Prensa la sensaci¨®n fue que intentaba poner en valor a su actual plantilla, m¨¢s que ponerse el disfraz de consejero delegado. Si la lectura del futuro Madrid es ver desfilar por la puerta de salida a jugadores j¨®venes e internacionales como Llorente, Ceballos u Odegaard, adem¨¢s de la tesorer¨ªa, hablaremos del cambio de modelo. Ya queda menos para ver el peso aut¨¦ntico de Zidane en la planificaci¨®n del nuevo Madrid, con Keylor, con Pogba, sin Bale y si de verdad estamos ante un entrenador de ¨¦xito o ante un m¨¢nager al estilo brit¨¢nico.