Los saltos de Guardiola le desmienten

Desde 1962 el Tottenham no se met¨ªa en unas semifinales de Copa de Europa. Eso explica las escenas de alegr¨ªa de Pochettino y sus jugadores por la clasificaci¨®n tras un partido tremendo, con siete goles en una noche cargada de alternativas y salpicada con intervenciones del VAR. Un partido para el recuerdo, que engrandece esta competici¨®n y a los dos contendientes. Premio gordo para Pochettino, que lleva a?os construyendo con seriedad este proyecto. Y para el coreano Son, ese muchacho que se libr¨® de la mili gracias a que Corea fue campeona de Asia, y hoy vive un destino incomparablemente m¨¢s feliz que el de vestir el caqui.

Creo que Guardiola hizo mal al decir ¡°no me contrataron para ganar la Champions¡±. Sus saltos de alegr¨ªa cuando crey¨® haber alcanzado el 5-3 desmienten esa pretendida distancia con esta competici¨®n, que le reh¨²ye desde que se separ¨® de Messi, Xavi e Iniesta. Hab¨ªa algo de curarse en salud, o de la zorra y las uvas en esa declaraci¨®n. Es admirable el trabajo de Guardiola, es bello el modelo que cultiva, pero se juega para ganar, no para sacar almas del purgatorio. Todo lo que se hace y se intenta con el mejor prop¨®sito, como es su caso, merece aplauso y admiraci¨®n, pero lo que se pide es ganar. Y en Europa, ganar es ganar la Champions.

Lejos de all¨ª, el Liverpool resolvi¨® ante el Oporto con un resultado que durante la primera parte era dif¨ªcil de suponer. El Oporto borr¨® al Liverpool durante muchos minutos, s¨®lo que fall¨® en el remate. Marega, de gran desmarque y optimista que remata todo lo que le llega, dej¨® en nada el buen f¨²tbol de los suyos. Luego, a partir de marcar el Liverpool, cuando el descanso ya se acercaba, el Oporto vio que la cosa era imposible. La tropa de Klopp y Salah pasa ronda y se enfrentar¨¢ al Bar?a, ida en el Camp Nou, vuelta en Anfield. Una gran semifinal, como la Tottenham-Ajax. La Champions sigue. Sin Cristiano ni Guardiola, pero con mucha miga.