Bale y Marcelo, un ala que flojea mucho
Un golpe, una contractura... Solari no sab¨ªa bien qu¨¦ decir ante la nueva lesi¨®n de Bale. ?Habr¨¢ esta vez parte m¨¦dico? Supongo que no, nunca lo hay. Florentino ha hecho tab¨² de los percances f¨ªsicos de Bale, que se deben a medias a su fin¨ªsima y especial musculatura, y a medias a su bajo umbral del dolor. Siempre en la l¨ªnea de quedar bien con el jefe, Solari achac¨® el tropez¨®n de Vila-Real a que hab¨ªan echado en falta a Bale en la segunda parte. La verdad es que en la primera no hab¨ªa hecho gran cosa. Pero en todo caso, ahora tocar¨¢ echarle en falta unos partidos m¨¢s. Entre goles estupendos, frecuentes ausencias. Eso es Bale.
Seg¨²n avanza la temporada parece m¨¢s claro que con la salida de Cristiano el Madrid ha ca¨ªdo mucho. No as¨ª ¨¦l, ¡®capocannoniere¡¯ en Italia. La pretensi¨®n de que Benzema y Bale liberados de su abrasivo compa?ero, rendir¨ªan m¨¢s y compensar¨ªan su salida, ha resultado un fiasco. Y eso que Benzema s¨ª ha asumido un nuevo papel. Se ha convertido en un jugador atento, implicado, con la cabeza puesta en el juego los 90 minutos, sin apagones, y con algo m¨¢s de mirada al gol. Pero Bale no le ha acompa?ado. Es una especie de superm¨¢n fr¨¢gil, un hombre de cristal con el que es dif¨ªcil contar en plenitud y crear un modelo en torno a ¨¦l.
Qui¨¦n sabe si esto le dar¨¢ una nueva oportunidad a Isco. Luis Garc¨ªa fue elogioso con ¨¦l al final del partido, dijo que les complic¨® por su manejo de bal¨®n. No as¨ª Solari, que al decir que hab¨ªan notado la falta de Bale estaba indirectamente echando por tierra la tarea del reemplazante, Isco. Mientras, crece otro problema en el equipo: Marcelo. Nunca fue un tit¨¢n de la defensa, pero intentaba cumplir decentemente en ese papel, cuando tocaba. Ahora su desentendimiento de las tareas de atr¨¢s empieza a ser flagrante. El Madrid es muy d¨¦bil por ah¨ª, y esa es una de las razones de que sea el segundo equipo m¨¢s goleado fuera, tras el Huesca.