?Fuerza Delpo!
Ni los autores griegos cl¨¢sicos habr¨ªan ideado un drama como este. Juan Mart¨ªn del Potro lucha contra un destino que, hasta el momento, es demasiado cruel.
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Ni los autores griegos cl¨¢sicos habr¨ªan ideado un drama como este. Juan Mart¨ªn del Potro, tal como esos personajes que ten¨ªan su historia escrita de antemano, lucha contra un destino que, hasta el momento, es demasiado cruel.
La fractura de la r¨®tula izquierda, tras una desgraciada ca¨ªda en el Masters de Shanghai, vino a abultar esa lista de infortunios que parec¨ªa ser cap¨ªtulo cerrado de su vida. El presente parec¨ªa ser el momento para cosechar logros y llenarse de gloria tras un largo peregrinar por el purgatorio.
Del Potro pareciera ser m¨¢s viejo que los 30 a?os que tiene. Una, porque gan¨® el US Open muy joven, a los 20. Y tambi¨¦n por los retiros y regresos, todos forzados por lesiones muy graves. Inevitablemente cada uno de los retornos, por la fuerza y las ganas que le imprime, parece ser el de un veterano de mil batallas. Delpo tiene las batallas, pero le faltan los a?os.
La fractura de rodilla llega una semana despu¨¦s de que asegurara los billetes al Masters de fin de a?o y despu¨¦s de alcanzar el No. 3 del mundo. Era su primera clasificaci¨®n al torneo de final de a?o en cinco temporadas y la consolidaci¨®n definitiva de que estaba de regreso en la elite. Hoy es poco probable que pueda jugar entre el 11 y 18 de noviembre en Londres. Por los tiempos de recuperaci¨®n y porque ser¨ªa absolutamente entendible que no quiera ni siquiera intentar un nuevo regreso.
"Es un golpe duro que me deja sin fuerzas an¨ªmicamente. Se me hace muy dif¨ªcil volver a estar en recuperaci¨®n, no lo esperaba", dijo Juan Mart¨ªn, un aut¨¦ntico hijo del rigor.
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Antes del fat¨ªdico partido contra Borna Coric, debi¨® bregar contra varias cirug¨ªas en ambas mu?ecas. "Ning¨²n jugador vivi¨® lo que yo pas¨¦ en cuanto a lesiones. Para los dem¨¢s es dif¨ªcil de entender", dijo Delpo hace unas semanas, al tiempo que cont¨® que para poder mantenerse en el tenis competitivo deb¨ªa someterse a tratamientos diarios de entre dos y tres horas.
El 2010 lo operaron de la mu?eca derecha. Estuvo fuera ocho meses. Cuatro a?os despu¨¦s se lesion¨® la izquierda y debi¨® volver a la Cl¨ªnica Mayo. Un a?o m¨¢s tarde se resinti¨® y regres¨® al quir¨®fano. All¨ª quiso largar todo: "No pod¨ªa lidiar con las lesiones, era joven y estaba triste todo el d¨ªa". Volvi¨® a operarse y el 2016 se dio una nueva oportunidad. Era la ¨²ltima.
Volver a estar en una pista ya era un premio. Pero no suficiente para satisfacer la ambici¨®n del tandilense que es m¨¢s grande que su 1,98 metro de estatura. Escal¨® del puesto 1.045 del r¨¢nking ATP hasta el 3 del mundo en dos a?os. Entremedio, gan¨® la medalla de plata en los Juegos Ol¨ªmpicos de Rio, donde despach¨® en primera ronda a Novak Djokovic, y obtuvo la primera Copa Davis de la historia de Argentina.
El asalto final se ven¨ªa, con todo, a los 30, con el cuerpo a mal traer, con terapias diarias, con varias proezas en el cuerpo, como h¨¦roe griego y con aura de leyenda. Pero tuvo un fat¨ªdico tropiezo en Shanghai.
?Fuerza Delpo! Tu gloriosa historia tiene que terminar de otra manera.