Ante el pugilato entre Rubiales y Tebas
Se va acercando la fecha prevista para el partido de Miami (ya saben, 26 de enero, Girona-Bar?a) y a¨²n no sabemos si s¨ª o si no. Yo creo que s¨ª, tal como veo las cosas. Tebas ha puesto todo el carb¨®n en esa m¨¢quina, porque entiende, como en tantos casos antes, que romper h¨¢bitos es favorable para el f¨²tbol. En lo que le conozco, me parece que Tebas s¨®lo tiene miedo a una cosa, que es el inmovilismo. Lo malo es que en su avance revolucionario no se toma la menor molestia, o as¨ª me lo parece, en proponer siquiera las cuestiones que va avanzando, de forma que sorprende e incomoda a los que viven (vivimos) conformes con las cosas como estaban.
En este caso ha chocado con Rubiales, presidente de la Federaci¨®n, que no es precisamente un inmovilista, sino m¨¢s bien un sindicalista agresivo. Pienso que Tebas bien hubiera podido comentarle su idea en su momento, reunirle, pongamos por caso, con Roures (que tiene vara alta en el Girona) y con Bartomeu (que vio bien el asunto desde el inicio). Una discreta reuni¨®n a cuatro, con un programa de comunicaci¨®n pactado, hubiera sido un buen punto de arranque. La propuesta es revolucionaria, altera el origen del campeonato, todos contra todos, en todos los campos, ida y vuelta. Una excepci¨®n a ese principio exig¨ªa un acuerdo previo.
Eso no lo hizo Tebas y Rubiales se resiente. Lo curioso es que tampoco se atreve a oponerse, se?al de que quiz¨¢ no le parezca tan mal. ?l mismo organiz¨® la final de la Supercopa en T¨¢nger, estupenda idea. Pero ahora, pillado a contrapi¨¦, no dice que s¨ª ni que no, pero trata de buscar qui¨¦n dice que no en su lugar, sean la AFE, la FIFA o el Gobierno, como elementos interpuestos. Pero le¨ªdos los textos, quien puede poner el sem¨¢foro en rojo es ¨¦l, y no lo hace. Cuando esto surgi¨®, me dijo que no se daba por enterado, ya que no ten¨ªa la petici¨®n formal. Ahora la tiene y a¨²n no dice nada. Empieza a correr prisa que se manifieste de verdad sobre el hecho.